La Justicia mendocina confirmó ayer a la tarde que el cadáver quemado que había sido hallado en Las Heras el domingo pasado pertenece a Ricardo Requelme, un policía que era buscado por sus familiares hace varios días.
Una mujer se había presentado el lunes en una oficina fiscal de Las Heras para denunciar que no tenía noticias de su hermano desde el viernes pasado. Desde Investigaciones de inmediato se asoció la desaparición del uniformado con el cadáver encontrado en Las Heras el domingo al mediodía.
El dato policial fue trasladado a la fiscal de Homicidios Claudia Ríos, quien lidera la investigación y ordenó de inmediato la extracción de sangre a la hermana de la posible víctima para avanzar con un análisis comparativo de ADN.
Finalmente, tal como lo había anticipado una fuente consultada por el diario Los Andes, desde el Ministerio Público Fiscal confirmaron ayer martes que el cuerpo quemado era el de Requelme. Se comprobó a través de las huellas tomadas por Policía Científica en horas de la mañana y un informe de ADN posterior.
A la espera de una conferencia de la fiscal pautada para hoy miércoles, hasta el momento trascendió que Requelme era un auxiliar de 31 años, que vivía cerca de la zona donde se encontró el cadáver quemado, que a veces cambiaba de domicilio y que solía tener problemas de dinero. También circuló que le habían retirado el arma por supuesta denuncia de violencia de género.

¿Crimen mafioso?

El hallazgo del cadáver quemado fue reportado por un vecino de Las Heras que pasó el domingo al mediodía por el cruce de calles Cacique Guaymallén y Pascual Segura.
Allí, en un cañaveral cerca de un canal ubicado frente a los hornos de ladrillos, se topó con los restos quemados de un hombre.
El lunes la fiscal que investiga el hecho explicó que “la muerte se produjo por arma de fuego y no hay otros indicios que podamos indicar qué sucedió en ese lugar”, según informó Los Andes.