Ayer a la mañana, Pedro Quinteros (50), acusado de un hecho de “abuso sexual con acceso carnal” y otro de “grooming”, ambos cometidos en perjuicio de adolescentes en la ciudad de Tinogasta, donde se desempeñaba como dirigente de una escuela infantil de fútbol, fue trasladado y alojado en el Servicio Penitenciario de Miraflores.

Esta disposición se cumplió luego de que el juez de Control de Garantías de la Quinta Circunscripción Judicial con asiento en esa cabecera departamental, confirme el Control de Detención para el imputado por los graves cargos.

Niños en peligro

El dirigente, que también está sospechado de distribuir material pornográfico infantil, fue arrestado la semana pasada como consecuencia de una larga y minuciosa tarea investigativa llevada a cabo de forma conjunta con la Policía y la Fiscalía de ese departamento, que el año pasado recibieron un alerta internacional por la presunta difusión de imágenes que vulneran los derechos de menores de edad. Tras varios allanamientos, en los que se secuestraron múltiples dispositivos electrónicos y soportes digitales, se concluyó que, además de esto, el sujeto presuntamente actuaba como depredador sexual, ya que se ponía en contacto mediante redes sociales con víctimas de entre 12 y 18 años, con la intención de extorsionarles para luego acceder a un encuentro íntimo con los chicos. Por lo menos en uno de los casos, este delito se habría concretado, informaron oportunamente la fuentes, aunque también se sospecha que a lo largo del tiempo hayan sido más las víctimas.