Hoy, en ámbitos del Juzgado Correccional Nº 2, comenzará a ser juzgado un enfermero acusado de abusar sexualmente de su sobrina, una niña de 12 años, en la zona norte de la Capital en 2014 y salió a la luz por una carta que la pequeña habría escrito para contar las aberraciones a su familia. 

A partir de las 9.30 estará sentado en el banquillo de los acusados un hombre de apellido Jerez, que se desempeña en un conocido sanatorio privado de esta ciudad. Éste habría sometido a la pequeña cuando se quedaba en casa de sus tíos (los progenitores de la víctima). Allí aprovechaba para tocarla a cambio de caramelos. 

Aparentemente, los aberrantes ultrajes habrían sucedido en varias ocasiones, hasta que la pequeña dio a conocer el hecho a través de una carta que dejó a sus padres, porque el presunto autor la habría agredido y debió protegerse en el baño de su casa. 

El supuesto depravado estuvo acusado desde un primer momento por el delito de “abuso sexual agravado por el vínculo”, aunque meses más tarde la carátula bajó a “abuso sexual simple”, por lo que el juez correccional Mario Varela será el encargado de impartir justicia.