Entre las primeras horas de la tarde del domingo y la madrugada de ayer en la Capital, la policía intervino para brindar asistencia a varios niños que, por razones que son materia de investigación, fueron abandonados a su suerte por sus progenitores.

Por un lado, a las 16.30, personal de la comisaría Primera tomó conocimiento que en el interior de la Terminal de Ómnibus, ubicada en la avenida Güemes al 800, habría dos niños aparentemente abandonados.

Rápidamente, los policías llegaron al lugar y procedieron al resguardo de dos niños de 5 y 8 años, que fueron encontrados solos deambulando sin la custodia de una persona mayor, por lo que fueron puestos a disposición de la dirección de Infancia y Adolescencia, desde donde se impartieron las medidas a seguir, y las actuaciones quedaron a cargo de sumariantes del Precinto Judicial Nº 1.

Llorando por comida

Por otra parte, a la 1.20 de la madrugada de ayer, por requerimiento del Comando Radioeléctrico, efectivos de la comisaría Octava se hicieron presentes en un domicilio ubicado en el barrio 18 Viviendas Norte, donde se entrevistaron con una joven mujer de 19 años, quien manifestó que a su domicilio habría llegado llorando una niña de 14 años y le pidió comida, ya que estaba junto a sus tres hermanos, dos niñas de 10 y 11 años y un niño de 13, solos en su casa, sin el cuidado de sus progenitores desde hacía unos tres días.

De inmediato, los policías procedieron a resguardarlos, les brindaron la contención correspondiente y dieron intervención a la dirección de Infancia y Adolescencia, desde donde se indicaron las medidas a seguir, mientras que sumariantes de la Unidad Judicial Nº 8 labraron las actuaciones de rigor.