En el marco de la investigación que se lleva a cabo en contra de un sujeto de apellido Juárez, un conocido deportista catamarqueño que fue denunciado por una adolescente de quien habría abusado en el interior de un gimnasio de su propiedad en la zona sur de la Capital, trascendió de fuentes extraoficiales que no se descarta que se sumen otras denuncias por hechos de similares características.

Además, en el transcurso de la mañana de hoy se llevará a cabo la audiencia de control de detención solicitada por el fiscal Mauricio Navarro Foressi, quien pidió al juez Ramón Porfirio Acuña que el joven de 33 años, imputado por abuso sexual simple agravado, continúe privado de su libertad.

Mientras tanto, según trascendió por fuentes vinculadas a la investigación, podrían sumarse nuevas denuncias teniendo en cuenta el modus operandi del sujeto, lo que hace presumir que habría otras víctimas que no se animaron a radicar la denuncia penal en su momento.

Cabe recordar que el pasado miércoles por la noche, el representante del Ministerio Público lo indagó, pero el acusado decidió guardar silencio ante el funcionario judicial. 

Por otro lado, según fuentes judiciales consultadas por este medio, se habrían tomado testimonios que comprometen la situación procesal del detenido. Si bien la planilla prontuarial de sujeto estaría limpia, su condición de entrenador y propietario del sitio agravaría la acusación en su contra, ya que la menor de edad estaba bajo su cuidado en el momento en que sucedió el hecho.

Asimismo, testigos que concurren al lugar donde se dio el supuesto ultraje habrían observado a la víctima salir de allí llorando y estado de shock, informaron a este medio fuentes judiciales.  

El caso fue denunciado el pasado viernes en la Unidad Judicial Nº 6, luego de que la menor relatara lo ocurrido a sus progenitores. Tras llevar a cabo el protocolo de abuso, finalmente Juárez fue detenido durante un allanamiento en la casa de su pareja.

El ultraje se habría dado en el interior de un edificio en el que funciona el centro de entrenamiento, en inmediaciones de la avenida Ahumada y Barros, esquina Mendoza, al sur de la Capital. 

El acusado, conocido en el ambiente del básquetbol, también sería entrenador en los centros de acondicionamiento físico. Este último rol es el que habría utilizado para acercarse a la víctima, una jovencita de tan sólo 16 años.