Tras conocerse que sería dejado en libertad el sujeto de 70 años acusado de abusar sexualmente de un jovencito de 19 que tiene síndrome de Asperger, la madre de la víctima se quejó amargamente por el accionar de la Justicia. “La Justicia está funcionando mal, porque es un ser humano con una discapacidad el que resultó dañado y tiene una debilidad que lo hace distinto”, aseveró.

La mujer expresó entre lágrimas que “no pararé de quejarme mientras tenga voz. Estoy totalmente desbordada por la situación porque si este viejo hubiera sido pobre, no sale así de fácil, pero tiene influencias”, dijo, asegurando que se le acercaron personas que conocen al denunciado.

“Quiero invitar a que la gente  que fue víctima de esta persona que radique las denuncias en su contra, porque esto se tiene que acabar. No tuvieron en cuenta que tiene un chico adoptado tampoco. Yo estaba tan contenta pero me duró bastante poco”, dijo con relación al momento en que supo que había sido detenido.

“El daño no se va a ir  porque él esté preso, ya que cada día que pasa la estamos pasando peor, porque mi hijo empieza a recordar y a revivir lo que pasó”.

Estado de salud

La mujer expresó que tras el hecho su hijo permanece internado y “debe tener una medicación continua, le tienen que poner inyecciones SOS para dormirlo porque entra en pánico. Si me voy al  kiosco y no me ve, piensa que me pasó algo. Me pedía por favor que no lo haga público para que no me hagan daño a mí, pero esta es una injusticia ante la que no me voy a quedar callada y voy a luchar  hasta el final. Según me dijeron, esos 80.000 pesos para el tipo deben ser un vuelto, pero él va a estar en su casa cómodo tomando mate y viendo la tele mientras que yo abandoné  a mi familia hace diez días para estar en el hospital. No puedo trabajar, ni cuidar a mis otros hijos, o cuidar a mi madre con cáncer en Córdoba. El daño más grande fue para mi hijo, pero todo esto dañó inmensamente a toda una familia”, aseguró.

Hecho 

Cabe recordar que el viernes 7 de junio el jovencito salió de un local bailable en Alto Fariñango, donde habría sido abordado por el septuagenario. Éste lo habría obligado a subir a su automóvil amenazándolo con un arma de fuego, para luego abusar sexualmente de él de una forma brutal y dejarlo abandonado en el parque Adán Quiroga. Tras esto, el joven intentó quitarse la vida consumiendo una gran cantidad de ansiolíticos.