Ayer al mediodía se conoció el veredicto del Tribunal de la Cámara Penal Nº1, que decidió absolver al puntero político acusado de abusar sexualmente de una niña de 12 años que es su sobrina política.

Si bien el Ministerio Público, encarnado por Gustavo Bergesio, sostuvo la acusación y consideró que la condena que se merecía era de 6 años de prisión, los jueces Carlos Moreno, Fernando Esteban  y Mauricio Navarro Foressi, hicieron lugar al pedido de la defensa, a cargo de Pedro Vélez, quien solicitó que su defendido sea absuelto por el beneficio de la duda.

La querella, representada por Sebastián Ibáñez y Bruno Jerez, pidió en sus alegatos la pena de 10 años de prisión.
Al término del juicio, Ibáñez indicó: “el Tribunal consideró que tenía un problema desde niña, lo que generó una duda sobre si el hecho existió o no, pero la querella no tiene dudas que el hecho haya existido, porque como lo dijo el fiscal, en este tipo de delitos no hay testigos, ya que ocurren entre cuatro paredes y en este caso, la víctima está imposibilitada de declarar, no porque no quiera sino porque no puede por el problema psiquiátrico y neurológico que tiene a causa del abuso”. 

Posteriormente, la querella anticipó que, tras conocerse los fundamentos en los próximos días, objetarán el fallo mediante una casación para pedir que la decisión del Tribunal se revea.

Defensa

“Acá nos encontramos con una causa paupérrimamente instruida en la que no se le tomó declaración a la víctima y no se le hizo una pericia psicológica, lo que es clave en casos de esta índole. Con la mera lectura   de la causa nos dábamos cuenta de un cuadro médico lamentable que padecía la menor, pero que no tenía que ver con un hecho abusivo”, aseguró el abogado defensor del puntero en diálogo con Catamarca en Cana, indicando que su situación actual se debe a un problema de nacimiento que le generó a lo largo de los años convulsiones y un retraso madurativo que desembocaron en una esquizofrenia.

Desazón  

Al conocerse el fallo de los jueces, la madre de la presunta víctima sufrió un ataque de nervios, por lo que cayó al piso frente a Tribunales y debió ser asistida por el SAME. 

Cabe recordar que la denuncia sobre el presunto abuso fue radicada en 2006 y tras una larga instrucción la misma fue elevada a juicio, pero pasaron nueve años hasta que éste llegue a concretarse.

Cabe recordar que la madre aseguró que luego del supuesto abuso, su hija, en ese entonces de 12 años, comenzó a tener síntomas de estrés postraumático, por lo que se lavaba permanentemente sus partes íntimas además de golpearlas y llorar descontroladamente. Su situación de salud fue empeorando y la joven, hoy de 26 años, es incapaz de comunicarse por sus propios medios.