Ayer, el juez federal Miguel Ángel Contreras, en diálogo con un programa de Radio Valle Viejo, explicó algunos detalles sobre los procedimientos realizados por Gendarmería y la policía local en el marco de un secuestro de más de 10 kilos de marihuana.
“Por la pandemia, se utiliza mucho la encomienda para traficar drogas”, explicó

el magistrado en cuanto a la nueva modalidad en la que las fuerzas de seguridad están al tanto en la lucha contra el narcotráfico.
Además, Contreras señaló que “esto se debe a que la circulación está prácticamente vedada y esto repercute también en este tipo de delitos, también como sucede con los siniestros viales, que bajaron prácticamente a cero. Entonces, los narcotraficantes buscan nuevos métodos para poder continuar con negocio ilícito”, lamentó.

“Para eso, nosotros también estamos evolucionando, aunque siempre vamos detrás de este delito, pero agilizando el sistema podemos mejorar los tiempos de respuesta del juzgado ante los hechos, por ejemplo: ahora yo puedo dar una orden de allanamiento solo por WhatsApp y eso está totalmente probado, y se incorporó como herramienta legal.

”También se agregó que el tráfico de armas del que se nutren los cárteles, por ejemplo los brasileños, que son tres los que han crecido, que se nutren de gente peligrosa, expresidiarios y demás, que son violentas y tipos que no saben si van a vivir en la siguiente hora, necesitan de esa gente” (sic), lamentó Contreras.

“En cuanto a los trabajos que realizamos en nuestra provincia, para mí, desbaratar un kiosco no es una cuestión menor, porque es la persona que le pone la droga en la mano a su hijo”, agregó.

Finalmente, el magistrado dijo que “gracias a los procedimientos pequeños, se ha podido investigar casos grandes, como en el Tucumán, con el caso Paradi, en el cual secuestramos más de 300 kilos de marihuana, u otros casos en los que esa gente está a nuestra disposición”, finalizó