Ayer a las 16.00, y luego de quedar firme la sentencia que condenó por abuso sexual agravado al intendente de Puerta de Corral Quemado, Enrique Aybar, el jefe comunal fue detenido y alojado en la Comisaría de Londres, Belén.

La detención se hizo efectiva por disposición de la Corte de Justicia, con intervención del Juzgado de Instrucción Tercera Circunscripción Judicial a cargo de Oreste Piovano.

Hasta el cierre de esta edición, se aguardaba en la sede policial de la localidad belicha una comisión del Servicio Penitenciario que trasladaría a Aybar hasta Miraflores, para el cumplimiento efectivo de la condena que le impuso la Cámara Penal Nº3.

Tantos años y dolor

El Esquiú.com dialogó con la víctima del intendente, la joven que hizo la denuncia que luego desembocó en el juicio que determinara su condena a 6 años de prisión de cumplimiento efectivo, quien expresó: “Estoy emocionada y contenta después de tantos años de espera y dolor. Fue muchísima la espera y parecía que no iba a suceder nunca. Fue algo eterno, pero pasó ”.
Con respecto al tiempo que el jefe comunal pasará tras las rejas, la joven, que tenía apenas 15 años al momento de los hechos, dijo: “Seis años no van a sanar el dolor que sentí y siento hasta hoy en día, pero al menos en parte se hizo justicia. Y no solo por mí, por todas las otras víctimas, las chicas que no pudieron denunciar, por todas las que  hicieron la denuncia y falta que se resuelva. Estoy en contacto con algunas de ellas y no quieren seguir porque están cansadas, y yo las entiendo, porque pasé por eso y viví la presión que vivieron”.

En la continuidad de su relato y recordando todo lo que significó para ella, y la lucha que llevó adelante desde el momento de la denuncia, en abril de 2013 y hasta el día de ayer, la joven expresó: “Para decirlo como fue, él a mí me cagó la vida. Me arrebató la adolescencia. Tuve que salir y alejarme de familia siendo muy chica, y ahora más que nunca, me tengo que quedar acá, la gente que trabaja para él es terrible y son capaces de cualquier cosa. Yo viví un montón de cosas, fui víctima de esa gente y de otra, que estaba a favor de él y  me hicieron bullying”.

Con respecto a esta medida judicial, la mujer expresó: “Esto nos dice algo bueno y es un avance para mi pueblo. Para todos esos  que se creen dueños de las niñas y de las mujeres y hacer lo que se les cante. Puedo decir que hay justicia”.
En referencia a Aybar como persona, la joven consideró que “es una persona a la que no le importa el dolor ajeno, no piensa en su familia, en nadie más, nunca lo hizo, siempre se manejó así. El día que salió del juicio con la condena y estaba sonriendo, a mí no me sorprendió. Cuando me hacía todo lo que me hizo (el día que se produjo el abuso sexual), se me reía en la cara todo el tiempo”.

Idas y vueltas

Es necesario recordar que luego de la denuncia, la causa fue investigada, en primera instancia, por la Fiscalía de Instrucción Nº9, en ese momento a cargo de Roberto Mazzucco, y el jefe comunal fue imputado por el delito de “abuso sexual simple agravado por ser encargado de la guarda”, pero el investigador pidió el archivo de la causa, situación que se revirtió por pedido de la querella.

En noviembre de 2015 se envió la causa a juicio. En ese momento, la Fiscalía avaló que la defensa de Aybar pidiera el sobreseimiento, pero el juez Ramón Porfirio Acuña no hizo lugar al pedido.

En 2017 el nuevo fiscal, Víctor Figueroa, elevó la causa a juicio. En 2018, el Juzgado Correccional N° 2 confirmó la elevación a juicio.

Se había fijado audiencia para septiembre de 2019 pero se postergó para octubre, que tampoco se hizo. Su abogado defensor había pedido que se suspendiera el juicio, ofreciendo $300 mil y que Aybar hiciera tareas comunitarias, pero este pedido fue rechazado.
Finalmente, el juicio se llevó a cabo en agosto de este año en una audiencia virtual que Aybar presenció desde Belén y el intendente fue condenado, aunque la sentencia se cumpliría una vez que quedara firme la sentencia, lo que sucedió ayer.