El viernes a la mañana, en el Juzgado Federal se presentaron Víctor Canata y su esposa para realizar una ampliación de la declaración indagatoria luego de que fueran investigados por falsificar declaraciones juradas. Si bien en una primera instancia decidieron abstenerse, ahora se defendieron y manifestaron que no fue su intención “poner en problemas” al hijo del fiscal Vehils Ruiz.

Según manifestaron fuentes judiciales, los padres de familia habrían argumentado además que desconocían la magnitud del impacto del decreto, que regía desde hacía poco tiempo desde que ingresaron al país.

En este sentido, también manifestaron al magistrado que el vehículo en el que se llevó a cabo el traslado era de su pertenencia, ya que el joven Facundo Vehils Ruiz y otro joven de apellido Richard habrían viajado a la vecina provincia, ya que no tenían un lugar para alojarse y estaban varados en la terminal de Tucumán.

Cabe recordar que la semana anterior, el hijo del fiscal federal declaró que realizó el viaje a la vecina provincia por razones humanitarias. También descartaron la utilización de un presunto “permiso especial” que se especuló en un primer momento.
El caso salió a la luz luego de que trascendiera una denuncia pública sobre presuntos ingresos de personas desde el exterior a pesar de que regía el aislamiento social preventivo y obligatorio. 

A partir de allí, el COE Catamarca denunció penalmente al hijo del fiscal y a la familia Canata, ya que habrían falseado la declaración jurada al omitir que provenían desde República Dominicana.

Al respecto, el juzgado corrió vista al fiscal Santos Reynoso, quien decidió abrir una investigación penal, ya que pudo corroborar que estaba frente a un presunto delito.

Esto, según el representante del Ministerio Público Fiscal Federal, causó una ruptura en los lazos con su par de cámara Vehils Ruiz “por hacer lo que dice la ley sin distinción de apellido”.