Ayer a la mañana se incorporaron dos testimonios en la causa que investiga la muerte de Natalia Romero, la ingeniera y profesora universitaria que fue encontrada sin vida a fines de septiembre pasado. Uno de esos testimonios dejó en evidencia que la profesional sufría violencia de género por parte de su pareja.

Según dio a conocer a El Esquiú.com la abogada querellante que representa a la familia de la mujer fallecida, Silvia Barrientos, se tomaron dos testimonios, uno a una prima de la ingeniera, quien además vivía cerca de su casa. Esta testigo relató que “el hombre (pareja de Romero) la maltrataba y había un contexto de violencia de género”.

Según indicó la letrada, la prima pudo observar en varias ocasiones moretones y marcas de violencia, además de relatar que aunque vivían cerca, el marido de la profesional no le permitía mantener contacto con ella u otras personas. “No la dejaba teñirse el pelo ni ponerse ropa linda o ajustada para ir a trabajar, tampoco que los chicos vayan a ver a familiares”, destacó.
La testigo también recordó un episodio en que Romero se sinceró con ella y le confesó que “no daba más” con su relación de pareja y se sentía temerosa por las actitudes del hombre.

Cabe recordar que a fines de septiembre pasado, el cuerpo sin vida de Natalia Romero fue encontrado en su domicilio, y aunque la causa fue caratulada como suicidio, sus familiares comenzaron a realizar presentaciones y manifestaciones para que se investigue a la pareja de la mujer, ya que sospechaban que este había tenido que ver con su fallecimiento.

El hombre, sin embargo, no fue citado ni para tomarle su testimonio o para ser indagado por el hecho y desde entonces, la familia viene exigiendo que desde la Fiscalía de Instrucción Penal Nº4 sea investigado en profundidad.