Luego de que el Tribunal de Responsabilidad Penal Juvenil Nº1 emitiera un auto interlocutorio mediante el cual se convocara a una audiencia para definir la situación de dos jovencitos imputados por un grave caso de abuso sexual ocurrido en Las Juntas, en un tenso clima se reunieron ayer las partes y hubo varios llamados de atención por parte del juez para los presentes.
El tribunal, presidido por el juez Rodrigo Morabito, estuvo presente ante el fiscal Penal Juvenil, Guillermo Narváez;  la defensa de los acusados, Claudio y Fernando Contreras, la asesora de Menores y la querella particular encarnada por Iván Sarquis.
Tanto el juez como la querella reclamaron el incumplimiento de los imputados ante las medidas impuestas, ya que no solo no habrían abonado la caución que se les fijó por la suma de $100.000, sino que habrían violado las medidas restrictivas que les prohibían abandonar sus hogares.

El fiscal, a su turno, sostuvo que los imputados debían mantener su libertad y el llamado de atención lo hizo el juez hacia los propios imputados, quienes al momento de declarar, se defendieron hablando mal de la presunta víctima de abuso sexual y responsabilizándola por los hechos de forma despectiva. El magistrado, haciendo uso de la perspectiva de género con la que este Tribunal suele desenvolverse, les llamó la atención por sus dichos.

Morabito hizo una recapitulación de la causa, destacando que en diciembre pasado el fiscal había asegurado que faltaba producir una sola prueba y estaría en condiciones para ser elevada a juicio, pero a ocho meses de eso, esto no ocurrió.

El martes próximo habrá veredicto, que podría constituir una sanción para los imputados o el apartamiento del fiscal, como se solicitó.

Los jóvenes responden por graves acusaciones de abuso sexual cometido en contra de una joven en Las Juntas, en septiembre de 2018.