La idea de que los delincuentes entran por una puerta y salen por la otra, parece abonada por los últimos sucesos, que causaron malestar en la propia policía.

Todo comenzó en la jornada del último viernes, cuando, conforme una denuncia penal radicada en el Precinto Judicial N° 5, integrantes de la fuerza detuvieron a un peligroso malviviente que fue liberado casi de inmediato.

En el precinto, una mujer de 51 años manifestó que mientras caminaba por la avenida Mariano Moreno, en inmediaciones a la Escuela Industrial, notó que detrás de ella se habría detenido una motocicleta de color rojo, en mal estado de conservación, en la cual se conducían dos hombres.

El acompañante la atacó, forcejeó para sacarle una mochila que llevaba puesta, empujándola y haciendo que cayera fuertemente a la cinta asfáltica, para sustraerle la mochila en la que llevaba diez mil pesos ($10.000) en efectivo y varios elementos personales.

A partir del caso, efectivos  de la División Investigaciones de la Policía de la Provincia llevaron a cabo tareas de su especialidad y materializaron registros domiciliarios en viviendas ubicadas en las calles Armando Correa al 1.300 y Florida S/N, propiedad de las familias Chávez y Rodríguez.

En ambos inmuebles y bajo las directivas de la Fiscalía de Instrucción en feria, los investigadores conjuntamente con Sumariantes de la Unidad Judicial N° 5, procedieron al secuestro de una motocicleta Motomel Blitz 110 cc., de color rojo, vestimenta y calzados varios que habrían utilizado estas personas al momento de cometer el hecho, como así también arrestaron a un hombre mayor de edad, de apellido Chávez.

Cabe destacar que, luego de realizar averiguaciones y tras haber observado filmaciones de diferentes cámaras de seguridad, los investigadores notaron que dicho rodado al igual que estas personas, serían quienes perpetraron hechos de la misma naturaleza, denunciados en distintas Unidades Judiciales de la Capital. Caso resuelto, responsable detenido.

Vano esfuerzo
Sin embargo, allí viene la peor parte de la historia, porque el ladrón volvió casi automáticamente a la calle.
El lógico malestar policial se reflejó en la información oficial brindada por la institución, donde se indica textualmente: “Finalmente, el aprehendido fue trasladado a la dependencia policial a disposición de la Fiscalía de Instrucción en feria, a cargo de la Dra. Yesica Andrea Miranda, quien dispuso su inmediata libertad, pese a que tras averiguaciones practicadas se pudo constatar que cuenta con antecedentes penales, en virtud de lo cual se continúan con los trabajos investigativos”.

Atrapado por vecinos
En otro caso de arrebato, un rol decisivo tuvieron los vecinos.
Fue ayer a las 14,15. A través del Comando Radioeléctrico, efectivos de la Comisaría Cuarta tomaron conocimiento que en la intersección de la Avenida ExPista  y calle Maipú, requerían la presencia policial.

En el lugar, el personal policial interviniente aprehendió a un joven, de apellido Mascareño (26), quien habría intentado sustraer mediante la modalidad delictiva arrebato un teléfono celular a una joven mujer de 20 años de edad, quien habría ofrecido resistencia y luego de un forcejeo la habría arrastrado unos metros por la cinta asfáltica, ocasionándole lesiones, en virtud de lo cual vecinos de la zona lograron demorarlo hasta el arribo del Móvil Policial.

Finalmente, el aprehendido quedó alojado en la dependencia policial, y se invitó a la damnificada a denunciar el hecho en el Precinto Judicial N° 4.

Ladrón en remis
Ayer, por requerimiento del Comando Radioeléctrico, efectivos de la Comisaría Segunda se constituyeron en la esquina de las calles Caseros y Córdoba, y se entrevistaron con un remisero, un hombre de 43 años de edad, quien manifestó que le habría realizado un viaje a una persona del sexo masculino el cual ingresó a un comercio de la calle Sarmiento a 800, para luego salir con una (01) cortadora de fiambre, y llevarlo hasta el Pasaje Tinogasta, inmediaciones a calle Rio Salado.

Rápidamente, los Policías se constituyeron en la calle Sarmiento al 800, donde tomaron conocimiento por un joven de 29 años, que le habrían sustraído dicha maquina, por lo que en el lugar se hicieron presentes efectivos de la Comisaría Primera, que por jurisdicción corresponde.

Luego, el personal policial interviniente conjuntamente con sus pares de la Seccional Sexta procedieron a verificar el domicilio brindado por el remisero, donde una joven mujer de 20 años de edad, hizo entrega voluntaria del elemento sustraído, que quedó en calidad de secuestro.