Esta mañana, en la Cámara N°1 de Responsabilidad Penal Juvenil se realizó la tercera jornada del debate contra el joven acusado de abusar sexualmente de Luz Villafañe, la niña que después de este traumático episodio tomó la decisión de quitarse la vida en la zona Sur de la ciudad.

Agrupaciones sociales y feministas se agolparon desde muy temprano de este viernes, frente al juzgado ubicado en calles Chacabuco y Junín, para apoyar a la familia de la pequeña.

Por tratarse de un hecho de índole sexual, el juicio se lleva a cabo a puertas cerradas, en la sala presidida por el juez Rodrigo Morabito.

La bogada querellante, Silvia Barrientos, adelantó a El Esquiú Play que hoy declararon las compañeras de colegio de Luz, quienes negaron que la menor haya “consumido drogas, que era una excelente chica y que jamás hubiera tenido una idea suicida” y destacó como “relevante”, la declaración del Dr. Andrada, quien hizo la autopsia de la pequeña Luz.

Barrientos dijo que “el médico fue contundente al determinar que la niña presentaba lesiones compatibles con el abuso sexual”.

Al ser consultada sobre las declaraciones de la familia del único imputado, que aseguraban que los resultados de la autopsia descartaba el abuso sexual, Barrientos insistió en que existen pruebas que demuestran lo contrario y que el testimonio del Dr. Andrada fue “contundente”.

En cuanto al testimonio de la madre, dijo que sostuvo ante el tribunal que “su hija (Luz Villafañe) no se drogaba, no salía sola, que la llevaron, la drogaron y la violaron”.

“Está claro que esto fue un abuso sexual, jamás hubo consentimiento y mucho menos de una niña de 13 años. Hubo lesión, hubo drogas, hubo violación y aunque no esté con nosotros seguramente se va a hacer justicia”, dijo la representante legal de la familia de Luz.

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