En horas de la mañana de ayer, un sujeto de 66 años que venía siendo juzgado en la Cámara Penal N°1 fue condenado a la pena de 12 años y seis meses de prisión al quedar acreditado durante el debate que abusó sexualmente de su hija de manera continuada por 10 años.

El fallo fue emitido por los jueces Fernando Esteban, Rodolfo Moreno y Mauricio Navarro Foressi, quienes por unanimidad definieron la condena por los delitos  de “abuso sexual simple agravado por el vínculo y en forma continuada” y “abuso sexual con acceso carnal agravado”.

Cabe mencionar que el miércoles último se llevaron a cabo los alegatos de las partes, momento en que el Ministerio Público Fiscal a cargo de Alejandro Dalla Lasta, solicitó la pena que finalmente los jueces impusieron al ahora condenado.

A su vez, el abogado a cargo de la defensa técnica del hombre había pedido una condena menor, de 10 años de cárcel para su defendido.

En el inicio del debate, que se llevó a cabo a puertas cerradas por tratarse de un hecho de índole privada, el imputado reconoció ser el autor de los hechos y pidió disculpas, mostrándose arrepentido.

Niñez rota

Los aberrantes hechos, que causaron graves consecuencias en la psiquis de la víctima, comenzaron a desarrollarse en el propio hogar de la niña cuando esta tenía apenas 5 años, en 2010.

El sujeto, quien no es el padre biológico de la niña pero la había reconocido como hija -lleva su apellido- y mantenía una relación de larga data con la madre de la víctima, comenzó a ejercer violencia sexual contra la pequeña en modo de tocamientos, pero con el paso de los años los episodios se hicieron más frecuentes.

La madre de la niña se retiraba del hogar para trabajar, por lo que ella quedaba al cuidado de su pareja.

Fuentes judiciales indicaron que los lamentables episodios tuvieron lugar por espacio de casi 11 años en un hogar ubicado en una localidad del interior de la provincia, dato que no se da a conocer para proteger la identidad de la víctima.

La niña permaneció en silencio hasta principios de este año, cuando decidió dar a conocer la situación y denunciar a su padre, quien la tenía amenazada de muerte para que no lo exponga.