Un joven de 28 años falleció ayer en el Hospital San Juan Bautista, cinco días después de haber sido paloteado en el barrio San Jorge, en la zona sur de la ciudad Capital. El caso ya está siendo investigado por la Justicia Penal ya que se busca dilucidar con claridad las circunstancias en las que fue atacado y lo que sucedió durante los días posteriores a este violento hecho. 
La madre de Elmer Bulacios, el joven fallecido de tan sólo 28 años, ayer radicó una denuncia para que se investigue la muerte de su hijo. 

La mujer, en diálogo con El Esquiú.com, comentó que su hijo asistió a una reunión con amigos el pasado sábado a la noche en una vivienda particular y volvió a su casa en la madrugada del domingo. Al mediodía, el joven le dijo que estaba dolorido, por lo que la mujer pensó que podía deberse a una ingesta exacerbada de alcohol. 
Dos días después, el joven todavía seguía acusando dolores y tenía un ojo con signos de haber sido golpeado, por lo que junto a su madre fue a buscar atención médica en el minihospital Carlos Bravo. Allí, en la guardia, le indicaron calmantes varios, se le colocaron inyectables y, a pesar de la necesidad de contar con una radiografía por recomendación de los legistas de la guardia, la misma no se realizó porque la aparatología no estaba funcionando. 

Al no menguar los dolores hasta el martes a la noche, la madre del Bulacios llamó al SAME, pero tras ser atendido en el domicilio los paramédicos habrían desestimado la necesidad de un traslado, recomendando que sea revisado por un médico por consultorio externo. El miércoles a la madrugada, sin que pasaran los dolores todavía, la mujer volvió a llamar al SAME pero, por vía telefónica, desestimaron la situación y adujeron que el cuadro del joven no ameritaba un traslado. Por esta razón, la madre de Bulacios llamó al 911, pidió ayuda policial y fueron éstos quienes convocaron al SAME, aunque infructuosamente ya que los paramédicos le indicaron calmantes y atención externa con un especialista nefrólogo ya que, según su diagnóstico, podía tratarse de una condición renal. 

En la tarde del miércoles, sin respuestas todavía, la mujer decidió llevar a su hijo por su cuenta al Hospital San Juan Bautista en un remís. A esta altura, según su relato, el joven ya casi no comía y estaba prácticamente deshidratado. Al ser atendido en la guardia del hospital, Bulacios fue internado en terapia intensiva. 

En este momento, según detalla la mujer, surgió otro dato preocupante: un joven de la guardia del hospital reconoció a Elmer y le explicó a la madre que el joven había pasado el fin de semana por allí porque lo habían atacado. Este joven de guardia le aseguró, según su relato, que el joven tenía un corte en la cabeza que no pudo ser cocido porque “habían pasado más de 6 horas” desde el episodio que lo había provocado. 

Pasadas las horas, Bulacios fue trasladado al área de Cuidados Críticos y su situación comenzó a complicarse hasta que en horas de la tarde de ayer finalmente falleció. Las causas del deceso son, por ahora, materia de investigación por parte del fiscal penal en feria, Hugo Costilla, quien ordenó incautar el celular del joven para obtener más datos sobre el caso. La madre de Bulacios ya había radicado la denuncia el pasado jueves. 

Al tomar conocimiento de la golpiza que había sufrido su hijo Elmer en la reunión del sábado, la mujer comenzó a pedir en redes sociales que aquellas personas que tengan conocimiento de la identidad de las personas que lo golpearon y que tengan en su haber material fotográfico o audiovisual del hecho, se lo acerquen. Así, recibió numerosos llamados en los que le confirmaban el desenlace de los hechos en la madrugada del domingo.  

“Una chica que estuvo esa noche me llamó hoy –por ayer- para decirme que estuvo con él esa noche, pero que ella lo ayudó. Me dijo que no sabe de donde salieron todos esos changos que ‘lo comenzaron a cagar a palos y le robaron la billetera’. Mi hijo había sacado un préstamo, tenía treinta mil pesos y papeles en la billetera. También me enteré que esos chicos quisieron robarle la moto, pero él no la entregó. En eso las chicas comienzan a gritar que van a llamar a la Policía y los que le pegaban a mi hijo lo sueltan y se van, pero para esto ya lo habían pateado, le  reventaron el ojo, un tajo en la cabeza…”. 

La mujer se lamentó por la atención recibida de parte del SAME que se negó a trasladar al joven al hospital cuando éste ya no podía trasladarse por sí mismo, “no quisieron llevarlo, tuve que llamar a la Policía para que los llamen y al ir y ver a mi hijo me dijeron que vaya por consultorios externos que era un tema de riñones. Lo tuve que llevar en un remís a mi hijo, agradezco a la caridad de las personas de la remisería que me ayudaron a llegar con mi hijo al hospital. Pareciera que hay que estar muriendo para que te lleven en las ambulancias del SAME”. 

Entre sus dichos, la mujer pidió que se investiguen las causas por las que murió su hijo “no puede ser que en cinco días mi hijo haya muerto por los golpes que le dieron para robarle dinero. Nunca pensé que perdiera a mi hijo de esta manera”.