A 12 años de la muerte de Sonia Garabedián, ayer se conoció que la  fiscal Yesica Miranda apartó de la querella e imputó a Roberto Barros, la pareja de la víctima al momento del hecho. 

Según informaron fuentes judiciales, la representante del ministerio público fiscal, lo acusa, en principio de “abandono de persona” y comenzará a ser investigado como responsable del crimen. 

Cabe recordar que, en septiembre pasado se pudo conocer que un nuevo informe, esta vez de Gendarmería Nacional, confirma un informe realizado en 2015 que da cuenta de que la víctima falleció en realidad por “asfixia por estrangulamiento”.

Por este hecho, el querellante pidió a la fiscal Yésica Miranda que aparte a Roberto Barros, el otro querellante que tiene la causa, y sea imputado por el delito de homicidio, figura penal que es aplicable al momento del hecho, ya que hasta ese entonces no se había implementado el “femicidio”.

Informe
“El equipo forense de Gendarmería Nacional dijo que a pesar de transcurrido el tiempo, todos los elementos de prueba avalan la hipótesis del Equipo de Antropología Forense (EAAF) de 2015, donde además se cuestiona a la policía y a los médicos de policía que realizaron la autopsia a la víctima”, remarcó el abogado Iván Sarquís.
Hecho 

Liliana Garabedián tenía 37 años cuando fue encontrada muerta el 12 de diciembre de 2010 en un descampado de la localidad de Nueva Coneta (en Capayán).

Desde el hecho, investigaron cinco fiscales, dos de los cuales decidieron que no había delito y enviaron la causa a archivo.
Ahora la causa está en manos de la fiscal Yésica Miranda, quien tomó la decisión de escuchar a la familia de la víctima, quienes hace siete años que imploraban a la justicia por el apartamiento del presunto homicida.