Una mujer, madre de dos niños, subió un video a Facebook desesperada, ya que se está por cumplir un año de que no puede ver a las criaturas. Pide a la jueza de Familia que interviene en su causa que “tenga piedad y me dé la oportunidad de verlos de nuevo”.

“Mis chicos no están yendo a la escuela porque mi ex no los está llevando”.

La mujer relató que todo esto comenzó luego de separarse del padre de sus niños, ahora de 7 y 5 años. “Yo rehice mi vida, me puse en pareja y quedé embarazada y él (su expareja)  trata de vengarse de mí por eso, entonces no me dejó ver más a mis hijos, incluso hizo una denuncia por abuso que ya quedó confirmado que no es cierto. Lo que más me preocupa es que hablando, con madres de compañeritos de mis nenes, me entero que no los está mandando a la escuela. Dice que porque no puede porque tiene que trabajar”, contó en diálogo con El Esquiú.com.

La madre indicó que  su expareja, con el objetivo de que no pueda ver a sus pequeños, radicó la denuncia por abuso, pero que al realizarse la Cámara Gesell al niño, esta salió con resultados negativos, por lo que la causa no prosperó.

De todas formas, la denuncia valió para que desde la Justicia impongan una medida de prohibición de acercamiento, por lo que, legalmente, no se  puede acercar.

“Yo estuve muy mal de salud por el nacimiento de mis mellizos, con un embarazo de riesgo y después con mucho reposo, pero ahora que estoy mejor, estoy volviendo a la lucha. Subí el video a Facebook porque no me queda otra, espero que lo vea la gente de la Justicia y haga algo, puntualmente la jueza de Familia N°3, Irma Filippin, que tiene la causa”, manifestó.

“Lo único que quiero es ver a mis hijos, el 25 de abril se va a cumplir un año de la última vez que los vi, y seguir con el acuerdo que antes teníamos con mi ex, que una semana los tenía cada uno. Yo me puedo asegurar de que  vayan a la escuela y que no les falte nada”.

Cabe mencionar que este medio ya había reflejado la situación de la progenitora a fines del año pasado, pero la situación aún continúa sin resolverse.