Luego de que el juez Rodrigo Morabito rechazara el pedido de prórroga presentado por el fiscal del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil, Guillermo Narváez, para la investigación de la causa de Andrea Navarro, la mujer que fue apuñalada más de 40 veces en el sur; ayer se conoció que la causa finalmente fue elevada a juicio.

El fiscal dio por concluida la investigación penal preparatoria y por lo tanto solo resta que el Juzgado fije una fecha para la realización del debate.

Andrea, en diálogo con El Esquiú.com, manifestó que se enteró por los medios de comunicación de la medida y que la noticia la movilizó. “Yo no he vuelto a dormir tres horas seguidas, no puedo enfrentarme al espejo, vivo con miedo y paso a siete cuadras de donde vive el agresor”, expresó, indicando que esa es la distancia existente entre el lugar de reclusión del joven que la atacó -quien se encuentra con prisión domiciliaria- y el lugar que ella habita ahora.

“Prácticamente estoy muerta por dentro y lo que no quiero es que haya otra Andrea, este agresor es irrecuperable”, dijo.
Además, la mujer se quejó sobre algunas manifestaciones públicas que realizó el imputado. “Me enteré que él dijo que hay muchas mujeres que están a favor suyo, que seguro que está hablando de mujeres de su entorno, y su abogado le dijo que se callara porque no le favorecía a su situación, pero me da impotencia que se burle de todo esto.

”Lo único que pido es una pena justa, ejemplar y efectiva en el Penal, él ya puede ir allí porque ya cumplió los 18 años”.
Por último, Andrea se quejó porque padece severas consecuencias psicológicas después del intento de homicidio que padeció  y que en la actualidad se siente presa: “No puedo andar como antes”.

Es importante recordar que el 30 de enero pasado la mujer fue atacada por el adolescente que vivía al lado de su casa, quien entró por la ventana armado con un cuchillo para robarle.

Al notar que Andrea estaba despierta, le propinó más de 40 puñaladas, hasta que asumió que la había asesinado. Milagrosamente, la mujer sobrevivió, aunque las puñaladas le dejaron fisuras en los pulmones y le causaron la pérdida de piezas dentarias, además de otras graves complicaciones.

El joven está imputado por “robo calificado por el uso de armas” y “homicidio criminis causa en grado de tentativa en concurso real en calidad de autor”.