Carlos David “Payo” Quevedo volvió a estar en el ojo de la justicia, esta vez, por un grave hecho de violencia de género. Según se pudo conocer, el agresor atacó a tiros a su pareja y la policía lo arrestó. 

Según informaron fuentes policiales, el lamentable hecho sucedió ayer alrededor de las 7.30, mientras efectivos de la Comisaría Sexta realizaban recorridos preventivos por la calle Caseros al 2.000, fueron alertados por un grupo de personas, y al descender de la unidad móvil observaron a una persona del sexo masculino manipulando un arma de fuego, para luego apuntar al personal policial interviniente.

Rápidamente, los Policías procedieron a resguardar la integridad física de las personas que se encontraban en la zona, y tratar de mediar con el agresor para que desistiera de su accionar, por lo que minutos después procedieron a la aprehensión de un hombre de 34 años, quien al momento de ser reducido intentó despojarse de un revólver marca Bagual, calibre 22 largo, que quedó en calidad de secuestro.

Cabe mencionar que, momentos antes, el aprehendido habría agredido físicamente a su pareja, una mujer de 34 años, por lo que fue trasladado y alojado en la dependencia policial a disposición de la Fiscalía de Instrucción en feria, mientras que se invitó a la damnificada a radicar la denuncia penal correspondiente en el Precinto Judicial N° 6. 

Antecedente
Vale resaltar que el atacante, supo estar involucrado en un homicidio en ocasión de robo, del cual resultó absuelto. 
El hecho ocurrió en la noche del 7 de mayo de 2010, cuando Diego Orlando Moya y Gaspar Exequiel Segura se presentaron a bordo de una motocicleta en la casa de Robert Durval Marchetti, donde también funcionaba una agencia de quiniela, ubicada en el barrio de Villa Cubas, en calle Conesa, a metros de Adán Quiroga.

Uno de ellos descendió de la motocicleta y entró a la quiniela esgrimiendo una pistola, con la cual encañonó al propietario, quien intentó defenderse.

El damnificado rápidamente intentó utilizar un revólver calibre 22, el cual se encontraba escondido en el lugar, justamente para ocasiones de robo. Sin darle tiempo a nada, el asaltante le asestó dos disparos, uno en el pecho y otro en el abdomen, lo que le ocasionaron la muerte casi instantánea. 

Por este hecho, el Tribunal de la Cámara Penal Nº 1 condenó hoy a Moya a 21 años prisión y a Segura a 19 años por la coautoría del delito de homicidio en ocasión de robo.

En tanto que Fernando Jorge Ariel Vega y Flavia Fernanda Quevedo recibieron una pena de 14 años de prisión por ser partícipes necesarios del homicidio, mientras que Carlos David “Payo” Quevedo, acusado de participación secundaria fue absuelto.