El intendente de Bañado de Ovanta, Elpidio Guaraz, tiene dos denuncias: una por abuso sexual y otra por abuso de autoridad, de la cuales una de ellas (abuso sexual) tiene un avance en la justicia, sin embargo, otro de los hechos está “trabado”. Al respecto, la abogada Natalia Páez Vaca, querellante de una de las víctimas, señaló que esa causa aún se encuentra “trabada” en la Cámara de Apelaciones y Exhortos, por lo que está al aguardo la resolución a fin de poder continuar con su trabajo. “Hace varios meses que está ahí por lo que no me permite hacer ninguna presentación”, apuntó.

Luego la letrada afirmó que “me llegaron rumores de que Guaraz dejaría el país” una vez que cumpla con su mandato en la intendencia “a un lugar adonde no haya un convenio de extradición con Argentina, lo que haría ilusorio todo este reclamo de justicia para las víctimas, ya que Guaraz terminaría eludiendo a la justicia”.  “Pido a la justica que de oficio tome alguna medida para evitar que él (por Guaraz) se vaya del país, y evitar que las víctimas se queden sin justicia”, lanzó la abogada. 

Recordemos que la mujer que defiende Natalia Páez Vaca, tenía un bar hospedaje el cual fue clausurado por el municipio “porque la víctima no quiso acceder a sus reclamos sexuales”. Por este hecho, el todavía intendente, fue imputado por el “delito de abuso de autoridad”, a pesar de que la fiscal Kranevitter “deja muy claro en la redacción del hecho del imputado que todo fue porque ella (la víctima) no accedía a sus pretensiones amorosas”.  “Es por eso que estamos hablando de un posible delito con una finalidad eminentemente sexual”, manifestó.

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