En el marco de un mega juicio a una banda narco en el Tribunal Oral en lo Criminal Federal, ayer se dio apertura a la segunda jornada del debate que tiene a casi una veintena de imputados. En la oportunidad declararon los últimos tres acusados que no pudieron concurrir a la primera audiencia y por otro lado arrancaron los testimonios. 

Cabe recordar que la organizacón narco, tenía ramificaciones internacionales y se sospecha que transportaban drogas desde la provincia de Paraguay para luego ser distribuidas en Buenos Aires y las provincias de Santiago del Estero, Tucumán, La Rioja, Santa Fe, San Juan y Catamarca. 

En esta oportunidad, el tribunal integrado por los jueces Enrique Lilljedahl, Juan Carlos Reynaga y Federico Bothamley (Santiago del Estero) le hicieron conocer el hecho a Mauricio Jaime, oriundo de Tucumán, uno de los imputados que tiene el juicio federal. El acto procesal fue realizado mediante video conferencia ya que Jaime no había asistido al inicio del juicio debido a que sufrió una afección de salud en la sala de debate, por lo que los magistrados le otorgaron el beneficio de la prisión domicialiaria.

Entre otras lineas, el imputado declaró que no se encuentra acogido a la figura de arrepentido y que simplemente “no tengo nada que ocultar” remarcó Jaime. 

En tanto que, luego el tribunal escuchó a Domingo Alberto Caro, a quien no habría ubicado para que compareciera al debate porque se encuentra detenido en una prisión en Tucumán. 

Por otro lado, también indagaron a una mujer de apellido Lisárraga, la cual estuvo prófuga y según fuentes judiciales, el pasado viernes se habría presentado en forma voluntaria ante la justicia de la vecina provincia tucumana. 

Además, durante la audiencia los jueces tomaron seis testimonios, cuatro de fuerzas de seguridad y dos testigos de actuación, allanamientos en casa de imputados Rolon y Silva, ambos con resultados positivos los allanamientos. 

Finalmente, los magistrados dispusieron un cuarto intermedio para el próximo jueves donde se dará continuidad al debate con más testigos. 

Hecho 
La investigación que terminó por desbaratar la organización narcocriminal inició en mayo de 2018, cuando se logró el secuestro de 30 kilogramos de cocaína en allanamientos producidos en Santiago del Estero, Tucumán, Buenos Aires, La Rioja, Santa Fe, San Juan y Catamarca.

La pesquisa fue llevada a cabo por el Juzgado Federal de Catamarca, desde donde se dispusieron entrecruzamientos de llamados telefónicos ante la sobreabundancia de negocios con el sello narco. Los allanamientos se materializaron en junio de 2019 en distintos puntos estratégicos del país.

Entre los detenidos hay tres policías riojanos, cuatro paraguayos, comerciantes porteños, tucumanos, santafesinos y sanjuaninos, apresados en el punto limítrofe entre Tucumán y Santiago del Estero.

La hipótesis firme es que la banda ingresaba droga de Paraguay, con destino a Buenos Aires. La “enfriaban” en diferentes provincias, incluidas las localidades de La Banda y Termas de Río Hondo (Santiago del Estero).