Mientras la justicia investiga bajo un total hermetismo las causas de muerte de Oscar Eduardo Ramírez, el efectivo de Infantería que habría sufrido un disparo de escopeta en su rostro, que le provocó una herida mortal, ayer se conoció que desde la jefatura de policía se inició un sumario interno para determinar las responsabilidades en el hecho.

Por su parte, fuentes judiciales informaron que un oficial de policía que cumplía funciones en la base de Infantería pasó a calidad de detenido. 

Si bien, pudo haberse tratado de un accidente, la justicia no descarta ninguna hipótesis y el numerario policial arrestado, es la última persona que vio con vida a Ramírez, ya que ambos habrían estado manipulando las armas en la base de infantería ubicada en la avenida Colon al 1.300.