Días atrás un sujeto mayor de edad fue detenido en la ciudad de Belén, departamento homónimo, por el supuesto delito de abuso sexual infantil. 

El hecho salió a la luz ayer al conocerse que los padres de un niño que sería alumno del profesor detenido habrían presentado una nueva denuncia en contra del docente, quien a la vez enseña catecismo en la iglesia local. Su pareja, quien también enseña catecismo a niños belichos, fue arrestada, pero con el pasar de las horas recuperó la libertad.

Fuentes policiales informaron que la detención del hombre, quien por el momento solo será identificado con sus iniciales, R.M.R., se produjo el martes de la semana pasada en la ciudad belicha. Si bien se informó que la detención se materializó en horas de la tarde noche, allegados a una de las víctimas indicaron que la policía se hizo presente en el colegio privado, donde trabajaba el docente y lo arrestaron.

La medida se materializó por orden de la fiscal de la Tercera Circunscripción Judicial con asiento en Belén, Dra. Marina Dalila Villagra, quien en el mes de enero pasado había recibo las primeras denuncias en contra del profesor de religión. Tras varios meses de investigación donde se sumaron pruebas documentales y periciales, la fiscal resolvió ordenar la detención.

Seguidamente, habría imputado e indagado al sujeto por los delitos de abuso sexual, continuando detenido a disposición de la Justicia.

El grave hecho, que nuevamente relaciona a personal ligado al clérigo catamarqueño con hechos de abuso sexual en perjuicio de niños menores de edad, es manejado con mucho hermetismo por la Justicia.

Solo oficialmente se informó que la causa se encuentra en plena etapa de investigación, que el profesor de religión y catecismo continúa detenido y que próximamente se le practicará a algunas víctimas la Cámara Gesell.

Por otra parte, se conoció ayer que el detenido habría sido citado como testigo en la causa judicial que terminó con la condena del sacerdote de Belén, Juan de Dios Gutiérrez, quien en el 2020 fue condenado por la Cámara Penal N°3 a la pena de 12 años de prisión. Sin embargo, durante todo el proceso judicial, el ahora detenido no se presentó. R.M.R. pertenecía al grupo religioso que dirigía Gutiérrez y del que también era parte la víctima, de 15 años.