El juez de Garantías en feria resolvió hoy que Eugenia Castro y Gilda Márquez, madre e hija respectivamente, continúen detenidas mientras avanza la investigación por el supuesto delito de homicidio calificado por alevosía en grado de tentativa. Ambas mujeres fueron arrestadas hace una semana tras un incidente ocurrido en Valle Viejo que dejó gravemente herida a Rosana Murúa, quien sigue luchando por su vida en la terapia intensiva del Hospital San Juan Bautista.

La decisión del juez respondió al pedido del fiscal de la causa, Dr. Laureano Palacios, quien solicitó que las imputadas continúen privadas de su libertad por considerarlo necesario para el curso de la investigación. Mientras tanto, la defensa de Castro y Márquez, a cargo del abogado Juan Pablo Morales, había solicitado la libertad o una medida menos restrictiva para sus clientas, planteo que no fue aceptado.

Los hechos que llevaron a la detención de ambas ocurrieron el pasado 20 de enero, cuando se registró una pelea entre varias mujeres tras una discusión entre los hijos menores de edad de la víctima y de las imputadas, originada durante un partido de fútbol. Según lo declarado por Castro ante la Fiscalía, ella no estaba presente en el lugar del altercado, mientras que su hija sí, aunque aseguró que “no apuñaló” a la víctima, atribuyendo la lesión al forcejeo.

Rosana Murúa fue intervenida quirúrgicamente el 21 de enero debido a una herida de arma blanca en el tórax y permanece en estado crítico. La investigación seguirá su curso para esclarecer los detalles del hecho y determinar las responsabilidades de las personas involucradas.