Se vienen cambios radicales en la estructura educativa que tendrá vigencia a partir de 2011 lo que, posiblemente, determinará que los docentes trabajen a full en pleno verano. Las clases comenzarán el 28 de febrero y, como es público y notorio, serán seis años de primaria y seis de secundaria, transformación que fue analizada en el congreso pedagógico, luego de receptados informes técnicos, propuestas de las diferentes asociaciones sindicales y el trabajo realizado entre los jefes de programas, directores de agencias y organismos dependientes de la cartera de educación. Como puede apreciarse no hay, aparentemente, improvisaciones con este plan que se implementará en cumplimiento de la Ley de Educación Nacional que, en su artículo 15, establece que el sistema tendrá una estructura unificada en todo el país.

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La estructura del nuevo sistema contará con cuatro niveles: Educación Inicial, Educación Primaria, Educación Secundaria y Educación Superior, adoptando nuestra provincia la modalidad de seis años para Primaria, seis para Secundaria y siete de duración para la Educación Técnica. El secundario, por otra parte, se divide en dos ciclos: uno básico, de carácter común a todas las orientaciones, y otro de carácter diversificado de tres años de duración.

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Se calcula que, con este esquema, se garantizará educación obligatoria con una duración de trece años y catorce para las escuelas técnicas, que se estructurarán en dos ciclos. El trayecto inicial, que deberá respetar la finalidad formativa propia del ciclo básico de la educación secundaria que, en la modalidad técnica, recibirá el nombre de primer ciclo y el orientado a la educación común que será el segundo ciclo. La educación secundaria contará con cuatro ofertas educativas, lo que es muy bueno, y los abanderados del actual Noveno Año pasarán a serlo del ciclo básico de la Nueva Escuela Secundaria (NES).