El municipio de la Capital termina el año en un marco de gran tranquilidad y hasta con la posibilidad cierta de que su conductor, el doctor Ricardo Guzmán, pueda convertirse en candidato a gobernador de la provincia. A diferencia de otros organismos donde abundaron las protestas y los reclamos, muchos de los cuales aún permanecen, todo fue calmo y en paz en los ámbitos municipales. Hasta se pagó el premio extra de $300 sin tener que pedir ayuda adicional a la provincia, como si lo hicieron otros. En materia de obras se cumplieron los objetivos trazados y, sobre el filo de este 2010, se firmó el convenio con la provincia para terminar la peatonal Rivadavia, desde Mota Botello hasta la avenida Güemes.
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Uno de los reclamos más fuertes que existió fue el de los taxistas y remiseros, que llevaron a cabo varias manifestaciones y cortes de calle por la distribución de las paradas. Finalmente se llegó a la conclusión que lo mejor era su liberación y que fueran utilizadas por estos trabajadores como quisieran, lo que, según un rápido relevamiento realizado por este diario, dejó conforme a la mayoría. En síntesis, no habrá más disputas y cada parada del microcentro o de algunos puntos claves, como la Terminal de Ómnibus, no tendrán propietarios exclusivos.
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En cuanto a la semaforización de la ciudad, también hubo avances. Se pusieron aparatos en esquinas que eran consideradas muy peligrosas (Rojas y avenida Virgen del Valle, Sarmiento y Avenida Belgrano, Ayacucho y Avenida Güemes) y la verdad que los nuevos focos iluminan con una claridad extraordinaria, muchísimo mejor que los que ya existían, y aparte no contaminarían. La idea para el 2011 sería aumentar los circuitos con semáforos y reemplazar a los que sufren las consecuencias de la obsolescencia al extremo que, en algunas horas del día, a la salida o entrada del sol, no se distinguen los colores verde, rojo y amarillo.