La subsecretaría de Familia que tiene a su cargo salir en auxilio de sectores vulnerables de la sociedad. En este sentido, la responsable del organismo, Claudia Ruibal habló del programa Chau Calle que funciona en El Peregrino. "Ahí participan los chicos que están en la calle. Pueden desayunar, pueden almorzar y estudiar. Tienen distintos tipos de actividades como ser talleres de pintura, talleres de deporte. Tienen apoyo para aquellos chicos que están escolarizados".  Respecto de estos chicos, afirmó que “la intención es que salgan de la calle. La idea es reintegrar al niño o al joven que está en la calle, a la familia. El tema del desayuno, el almuerzo y los talleres es una puerta, una estrategia, para que los chicos estén menos tiempo en la calle. El resto es todo un trabajo que tiene que ver con contención o prevención de estar en la calle”, informó.

Atención a indigentes

Asimismo habló de otros programas. "Para los indigentes tenemos un programa que se viene implementando en todo el Valle Central. Trabajamos de manera coordinada con Policía y enlace comunitario. En caso de que tengamos conocimiento de algún indigente o persona que esté en la calle, inmediatamente se lo asiste. La asistencia consiste, en aquellos casos que no quieran salir de la calle por alguna cuestión de promesa o creencia, en darles frazadas y vianda. En el caso de los que están dispuestos a salir de la calle, se los lleva a la Casa de la Tercera Edad, al hogar San Juan, al hospedaje El Peregrino o el albergue que tenemos en el hogar de ancianos”.
Respecto de casos en que los niños se encuentran en la calle junto a mayores, dijo que "hemos hablado con el Juzgado de Familia y el Juzgado de Menores, para pedir su intervención porque nosotros como ministerio no podemos intimarlos a que salgan. De todas maneras nos hemos acercado para ver cuáles son las demandas que tienen y para explicarles el tema de la protección que nosotros tenemos que hacer. Eso a veces se torna un poco imposible porque las madres o las familias no quieren salir de la calle, es su medio de ingreso, entonces hay que hacer todo un trabajo más profundo para poder sacarlos de ahí. Es un trabajo de todos, no tan sólo del Ministerio, por eso no es un trabajo tan sencillo”.

Algunas personas mayores eligen la mendicidad como forma de vida y se las transmiten a sus hijos. Ante este cuadro, surge la duda de ayudarlas o no. Respecto a esto, la funcionaria consideró que "al valor de la solidaridad no podemos desterrarlo. Se recibe mucha colaboración de la gente y es muy valioso. Pero hay que tener cuidado con las donaciones, con acercarnos y ofrecer ayuda sin conocer cómo es la historia”.

Cada vez más demanda social