Mientras los empresarios ya advirtieron que no retocarán sus valores, la Secretaría de Comercio Interior, que dirige Guillermo Moreno, ordenó que los precios de los combustibles que se expenden en las estaciones de servicios deberán retrotraerse a los valores comercializados al 31 de julio.
Fuentes oficiales informaron que esta resolución fue elaborada en base a las facultades que otorga la polémica Ley de Abastecimiento, y regirá a partir de su publicación en el Boletín Oficial.
La aplicación de esta medida obliga a todos los integrantes de la cadena de comercialización de los combustibles a retrotraer los precios que estaban vigentes al 31 de julio. La afectada sería Shell, que mantiene una guerra de años con el gobierno. Las naftas, en lo que va de 2010, subieron cerca de un 30%.
Mientras tanto, los inspectores de Moreno comenzaron a recorrer los establecimientos comerciales de expendio de combustibles con el objetivo de mostrar al gobierno activo frente a los aumentos de los combustibles.
En sintonía, el Ministro de Planificación, Julio De Vido, afirmó que la cartera a su cargo acompaña la medida dispuesta por la Secretaría de Comercio, que obliga a las estaciones de servicio a retrotraer los precios de los combustibles.
“Vamos a acompañar la medida de Comercio Interior para que sea lo más efectiva posible”, dijo De Vido durante un contacto mantenido con la prensa, en un acto en el que el Ministerio de Planificación se incorporó a la Red Federal de Control Público.

Repercusiones

“Esperemos que no haya un congelamiento de los precios”, señaló el directivo de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (Cecha), Raúl Castellanos, a medios porteños.
En tanto, la presidenta de la Federación de Empresarios de Combustibles (Fecra), Rosario Sica, desligó responsabilidad en la suba de los precios de las naftas y el gasoil, al sostener que esos valores “los establecen las petroleras y los consensúan con el gobierno”.
“Los propietarios de las estaciones de servicio no somos formadores de precios. Recibimos el precio de las petroleras y tenemos que ponerlo en nuestras planillas, nada más”, señaló Sica.