El Dr. Francisco Pérez, jefe de Área Programática 3 y Director del Hospital Neuropsiquiátrico de La Merced declaró acerca del funcionamiento de la institución.

“Yo separaría dos aristas muy distintas: el tema edilicio y la relación del hospital hacia la comunidad. Hay un hospital neuropsiquiátrico programado para realizarse en Huaycama. El tiempo dirá cuánto tiempo llevará en realizarse eso. Es un proyecto de avanzada manejado por la gente de Salud Mental de la provincia, por la parte de Arquitectura de la provincia".
 

"Mientras tanto tenemos que seguir funcionando desde La Merced. Es el único edificio de toda la provincia. En el hospital funciona en forma permanente un grupo de psiquiatras, de psicólogos. Se evalúa al paciente y se toma la decisión ya sea de dejarlo en observación aislado o tratarlo o reintegrarlo. Eso muchas veces lleva un tiempo".
 

"El edificio no tiene una estructura para tener dos hospitales en uno, entonces la gente interpreta como que los pacientes andan sueltos.
Una cosa es el paciente crónicamente tratado por un trastorno neuropsiquiátrico del cual una buena parte son retrasos mentales. Un retraso mental significa un paciente adulto que piensa como un niño. No es un paciente agresivo ni que vaya a robar, a pesar que hay algunos  pacientes crónicos de público conocimiento que han dado algunos problemas y q ue están en mano de la justicia. Hay pacientes que están con control permanente,, pero son casos puntuales".
 

"Lo que uno tiende a hacer es la externacion de pacientes. El proyecto de hospital nuevo es para 20 camas cuando en este momento tenemos 40 internados. Obras Públicas está trabajando en el edificio, tuvimos que reacomodar el grupo de gente y cosas propias del edificio. Pero estamos funcionando sin mayores inconvenientes".
 

"Se puede decir que hay dos hospitales. Uno para aquel que llega con un cólico renal, un cólico biliar, con una neumonía. Para eso hay dos habitaciones, de cuatro o cinco camas para cada uno. Para eso está determinado el espacio físico con su enfermería, sus médicos clínicos y otros médicos para la parte psiquiátrica. Si bien están separados por una puerta que está constantemente cerrada, estar enfermo mental no significa estar aislado, estar encadenado".
 

"En este momento tenemos 10 o 12 pacientes para externar, significa volverlos a la sociedad. Se plantea una serie de cosas con eso: quién tolera la parte económica puesto que el hospital le provee de los pañales, la medicación es gratuita en el hospital, tienen el psicólogo, el psiquiatra, el asistente terapéutico está trabajando permanentemente con ellos. Ahora vamos a abrir dos consultorios para trabajar sobre los pacientes externos junto con sus familiares para ir sacándolos del hospital de La Merced".