El cambio del billete por la moneda será definitivo, y comenzará a aplicarse a partir de noviembre de 2011. Con ese objetivo, el Banco Central ya convocó a una licitación internacional para la provisión de 300 millones de cospeles.

La pieza metálica será usada por la Casa de Moneda para acuñar esta nueva unidad de valor.

La decisión se tomó tras comprender que es un monto casi “fundamental” para el funcionamiento del consumo argentino, siempre ávido de “cambio chico”.

Si bien aun no hay muchas precisiones sobre la figura que se usará y la medida que tendrá, usará colores inversos a las de un peso. Es decir, el núcleo será plateado y el orillo dorado. “Esto puede demorar entre nueve meses y un año”, informaron fuentes del Banco Central.

Ingresando al sitio web de la entidad oficial que preside Mercedes Marcó del Pont se puede acceder a los pliegos de la licitación.