En una encuesta propuesta por El Esquiu.com sobre la necesidad de reformar la Constitución Provincial que promueve la reelección indefinida para la elección de Gobernador y Vicegobernador, un 74,78% de los lectores consideró que es conveniente realizar esta modificación. Mientras que un 24,35% se expidió por la negativa, y un 0,87% prefirió no emitir ningún tipo de juicio de valor. Hasta antes de 1988, los que accedían a la primera magistratura provincial sólo podían ser reelegidos una sola vez, y en períodos no consecutivos. En el año 1988, con la muerte del caudillo Vicente Saadi, se modifica el artículo 133 que permite la reelección indefinida del gobernador. Posteriormente asume Ramón Saadi. A los dos años y medio llegó la intervención federal y desde el 1 de diciembre de 1991 el Frente Cívico y Social se hizo cargo de la provincia hasta ahora.
Ante la proximidad de una nueva contienda electoral y si el actual gobernador, Eduardo Brizuela del Moral decide postularse nuevamente, sería la primera vez que un mandatario podría acceder a un tercer mandato y de manera consecutiva.

Detalle

El Esquiú.com propuso una encuesta en la web para que la sociedad catamarqueña opine sobre el tema, que tanto preocupa y ocupa a la clase política en estos últimos días. La posibilidad de un tercer mandato del actual gobernador abrió el debate en el ámbito político, pero también el ciudadano común se ha expresado al respecto.
Durante tres días se abrió la votación para saber si están de acuerdo con la re-re. Un 74,78% de los participantes se han expresado por el no. Algunos incluso han dejado comentarios del por qué de esta postura, en la que algunos consideran que la “alternancia” en el poder es saludable en el sistema democrático, porque el único dueño del poder es el pueblo. Asimismo destacaron que “si las elecciones fueran transparentes y la gente sabia, este tipo de planteamientos estaría de más”.

A favor

En tanto, algunas opiniones se pronunciaron a favor de la re-reeleción y fueron fundamentalmente en apoyo al gobernador o porque no ven en la oposición un candidato con el consenso suficiente para ocupar la primera magistratura.