Durante su tratamiento en la Cámara de Diputados de la Provincia, la Ley Impositiva 2013 sufrió algunos cambios importantes. Una de las modificaciones que introdujeron los legisladores miembros de la Comisión de Hacienda y Finanzas se relaciona con lo que pagan los casinos y salas de juego en concepto de Ingresos Brutos.
Una vez que se apruebe la normativa, los casinos y salas de jugos deberán pagar el diez por ciento en concepto de impuestos a los Ingresos Brutos, tanto por las máquinas tragamonedas y electrónicas como también por la recepción de apuestas.
Este incremento en el pago de los impuestos sobre los Ingresos Brutos se suma a la modificación que establece que no consideraran dentro de la base imponible las deducciones correspondientes a los montos pagados al apostador como consecuencia de la recepción de apuesta. Es decir, que se gravará directamente lo que se recauda y no luego de descontar lo que se paga en premios a los apostadores.
La anterior normativa sólo establecía el pago del diez por ciento a la recepción de apuestas, mientras que la explotación de juegos o entretenimientos mediante la utilización de máquinas electrónicas sólo se gravaba con el cinco por ciento.
Una de las justificaciones para introducir esta modificación es que se trata de una adecuación a lo que pagan casinos y salas de juego en otras provincias. Mientras que en Catamarca, por voluntad de la gestión de Oscar Castillo y por omisión de la gestión de Eduardo Brizuela del Moral, nunca se cobró como correspondía.
Cabe señalar que las modificaciones incorporadas a la Ley Impositiva y que afectan directamente a los casinos y salas de juego tienen el aval del Frente para la Victoria y del Frente Cívico y Social.
Ahora, el proyecto está en la Cámara de Senadores para su tratamiento, luego de obtener la media sanción de la Cámara de Diputados en la sesión del pasado jueves.