El periodista y locutor Pablo Andrés Ribecco denunció que fue víctima de una feroz golpiza y recriminó junto al intendente Pio Carletta, que “Icaño es zona liberada y toda la sociedad está en peligro, mientras la policía está borrada”. Según la denuncia, en esa localidad se vienen reiterando hechos de violencia, entre ellas, la soportada por el periodista, quien ya venía recibiendo amenazas telefónicas y era víctima de actos de intimidación por parte de extraños que, según aseguraron “pertenecen al barrionuevismo y trabajarían supuestamente para el candidato a concejal, Espeche (Tercera Posición), hermano del intendente kirchnerista de Bella Vista (Tucumán), Luis Espeche”.
Cuando terminaba de transmitir un acto del Frente para la Victoria, encabezado por Carletta, el director de la radio fue amenazado por un grupo que prometió “arrancarle la lengua si seguía opinando en la radio”. Según el relato, “Ribecco siguió caminando hasta que fue tomado por sus espaldas, arrojado al suelo y golpeado brutalmente”.
Lo que más indigna a la población es que “el periodista, con el rostro ensangrantado y la ropa destrozada, se acercó a los policías que custodiaban el boliche Cadabra pidiendo se resguarde su humanidad y los mismos le respondieron que ‘no podían hacer nada’”.
Luego de la respuesta, “lo atacaron por segunda vez” y “abandonaron en la ruta, con intenciones de que lo pise un automóvil”. Afortunadamente, fue levantado por un motociclista que lo llevó al hospital zonal de Icaño.
Según informaron, mientras lo herían, le advirtieron que “él era el primero de los muertos que iba a haber en Icaño” y que “eso le sucedió por defender a los putos de Carletta y Corpacci”, reiterando que “iban a boletear al gordo (Carletta)”.

Piden suspender la campaña

El intendente Carletta y algunos vecinos de Icaño piden esclarecer el suceso y estarían organizándose para protestar en Casa de Gobierno, pidiendo “la remoción de todos los policías del departamento La Paz por encubrimiento y abandono de persona”.
Asimismo, ante “la amenaza que se yergue sobre todos los ciudadanos”, pedirían una entrevista con la gobernadora, Lucía Corpacci, y solicitarían al ministro Gustavo Saadi que “se suspenda la campaña electoral” por falta de garantías constitucionales.
Por último, reclamaron que, “a 12 horas del suceso, el jefe de los agresores estaría identificado y no se toma la denuncia ni al periodista, ni al intendente, quien fue anoticiado que sería ultimado en las próximas horas”.