Las finanzas del desplazado titular de la agencia de la AFIP en Catamarca, Carlos Rodríguez, y las de su esposa, Elizabeth Figueroa, serán puestas bajo la lupa luego de que a la mujer le arrebataran $350.000 que llevaba consigo mientras cenaba el sábado por la noche en el shopping Altos del Solar. La imposibilidad de la mujer de precisar la suma que tenía en su cartera más otros elementos de duda que se fueron sumando, motivaron que el fiscal actuante, Roberto Mazzucco (h), requiriera al propio organismo federal en donde Rodríguez hizo carrera “información patrimonial y fiscal” del matrimonio.
Según pudo saber El Esquiú.com, en ese pedido de informes, desde la sede central de la AFIP le informaron al fiscal que tras la intervención de la delegación provincial, se inició una auditoría sobre la gestión que Rodríguez vino desempeñando. Para ello, el interventor designado, el contador tucumano Esteban Castillo, tiene amplias facultades.
Aún no se sabe qué nuevas derivaciones puede tener esa investigación.

Declararán sumariantes
En tanto, el funcionario nacional que ayer iba a declarar en el marco de la causa en la que hay dos detenidos por el robo que sufrió su esposa, no se presentó, aunque se estima que podría hacerlo en el transcurso de la presente jornada.
Paralelamente y en el marco de la investigación por el polémico arrebato, el fiscal Mazzucco llamó a declarar a los sumariantes judiciales que actuaron en la noche del robo, para dilucidar con más precisión los hechos que se sucedieron en los momentos posteriores a la denuncia.
El robo de la importante cifra a la mujer del jefe del organismo recaudador tuvo trascendencia nacional y fue tapa de los principales medios del país.