Los intendentes ya analizan la situación financiera municipal y coinciden en que no podrán hacer frente a un aumento sin la ayuda de la provincia. Esperarán a que la gobernadora, Lucía Corpacci, anuncie oficialmente el aumento para la administración pública provincial y de allí evaluarán las posibilidades.
En ese sentido, el intendente de Icaño, Pío Carletta, manifestó que “se verá el aumento que dicte la provincia y de ese modo vamos a operar. Mientras la provincia no autorice no vamos a hablar del tema aumento, estamos analizando pero las posibilidades económicas nuestras son bastantes restringidas”.
“Seguro que la provincia verá la manera de ayudar a los municipios que tienen problemas para afrontar el aumento”, afirmó.
Asimismo, Carletta comentó que “ya tuve una visita del gremio que estuvieron consultando a ver cómo estábamos, si habíamos cumplido con lo pactado con ellos cuando fue el aumento anterior y está todo cumplido de acuerdo a lo pactado en la conciliación”.
“Se fueron conformes, confían en la gestión, estamos pagando los sueldos en tiempo y forma, también reconocimos antigüedad, a los que no llegaban a los 500 pesos los ayudamos, así que el empleado está conforme, pero seguramente espera un aumento y los fondos están muy comprometidos”.
Por su parte, Amado “Coco” Quintar, intendente de Fiambalá, señaló que “tenemos un presupuesto muy exiguo, así que es imposible pensar en algún tipo de aumento sin la ayuda que nos pueda brindar el gobierno de la provincia”.
“Creo que esto va a ser un problema casi general. Es seguro que si la provincia da un aumento, los empleados del municipio también van a exigir un incremento así que tendremos que solicitar ayuda, no hay otra manera”, sentenció.
Por último, el jefe comunal de Santa María, Jorge Andersch, dijo que “hay que ver cuál es el aumento que dará la gobernadora para de ese modo evaluar lo que se puede dar en el municipio, pero lo real es que no estamos en condiciones de afrontar el incremento sin la ayuda de la provincia”.