Ayer, en Diputados se reunió la comisión de Legislación General. Asistieron distinguidos escribanos para dialogar sobre los dos proyectos en estudio, uno de Armando Zavaleta y otro de Hugo Ávila. Ambos impulsan la modificación al régimen legal del notariado (ley 3.843).
Entre los asistentes estuvieron Néstor Pérez Lozano, quien fue presidente de la Academia Notarial Argentina; Emilio Eduardo Ballina Benites, vicepresidente segundo del Consejo Federal del Notariado Argentino, y la presidenta del Colegio de Escribanos de La Rioja, Maura Eleonor Guzmán.
Ballina Benites, en dialogo con la prensa, rescató que en los fundamentos del proyecto de Ávila “hay mayores concordancias” pero en “el articulado habría que hacer sugerencias”. Sobre la iniciativa de Zavaleta aseguró: “No nos parece que tenga viabilidad jurídica en cuanto a que elimina el concurso para el acceso a la función”. 
Sucede que, según explicó el escribano, “habla solo de una prueba de idoneidad y elimina el número regulado como el concurso en el acceso”.
En cuanto al carácter de “hereditario” que cuestiona el diputado oficialista, Ballina señaló que si bien “es una visión que tuvo razón de ser”, en Buenos Aires “se fue solucionando”. En este sentido, comentó que se les propuso a los legisladores “que la figura del adscripto -quien puede ser el segundo escribano en el registro- también acceda por concurso”. Es decir “que no sea el titular simplemente el que los designe a su propio arbitrio”. 
En tanto, Benites evaluó que, llevado a la práctica, el proyecto de Zavaleta “lleva inseguridad jurídica y que personas no capacitadas lleguen al ejercicio profesional”. Sin perjuicio de ello, contempló que “sería perjudicial si los proyectos salieran como están”.
Por este motivo, comentó que el Colegio de Escribanos local “se comprometió a presentar un proyecto más integral”. 
Por su parte, la notariada Guzmán dijo que la defensa apunta a “que el escribano debe estar lo más calificado posible”. Además, comentó que en La Rioja, donde hay libre acceso al registro, hubo muchos inconvenientes. 
“El proyecto de Zavaleta es una copia casi textual de la ley actual que rige en La Rioja”, mencionó Guzmán. “Lo único que no tiene a favor con la otra iniciativa es el tema de los concursos”. Sucede que “el libre acceso, entregar un registro con ligereza, es malo”.