Adelanta sus propuestas para el municipio
Gutiérrez, el candidato a la intendencia de Andalgalá con proyectos propios
Si bien es cierto que la interna peronista del departamento Andalgalá no ha definido candidatos para las próximas elecciones, también es cierto que ya existen nombres que se perfilan para ocupar los cargos que deben renovarse, esto es, intendente municipal, senador departamental y un total de cuatro concejalías.
Uno de los precandidatos es Miguel Gutiérrez, un joven empresario de 38 años que, consustanciado con las problemáticas locales, aspira a suplantar en el palacio municipal a Alejandro Páez, quien completará su segundo año de mandato y no tiene reelección.
En diálogo con El Esquiú, Gutiérrez dio a conocer sus planes políticos y de gestión en el supuesto de llegar a la codiciada intendencia del departamento minero más importante de la provincia.
“Soy nacido en Andalgalá, vivo en Andalgalá y conozco de primera mano los problemas de Andalgalá. Mi militancia en el peronismo no es desconocida y coincido con los lineamientos que lleva adelante la gobernadora Lucía Corpacci”, fueron sus palabras de presentación.
¿Cómo ve y qué piensa de la gestión municipal de Andalgalá?
“Antes que nada hay que reconocer una profunda crisis social que, por un exceso de poder, se concentra en el Ejecutivo y es el método que le permite a las actuales autoridades ocultar la problemática. Del diálogo con los vecinos que llevamos a cabo con el equipo de campaña, concluimos que en pleno siglo XIX hay sectores que, aparte de la falta de trabajo, no tienen ni luz ni agua, a la que se provee con camiones. Si no se revisan estas carencias estructurales, no hay discurso político que valga y, lo más importante, la Municipalidad no puede ser el único contenedor de la desocupación, como ocurre hoy”.
¿No se emplean bien los recursos?
Exactamente. Se emplean mal, en el sentido que la administración municipal está poblada de empleados con becas, que no es trabajo de calidad y únicamente sirve para crear una dependencia económica y política. Ni hablar de eficiencia si se mantienen estas prácticas. Para conseguirla hay que modernizar la comuna, capacitar al personal y, a través de la informática, transparentar la gestión. Hacer algo parecido a lo que ocurre en municipios como Belén y Capital, entre otros.
¿En caso de acceder a la intendencia mantendrá a los becados?
“Cuando hablo de capacitar, hablo de ellos. En ese sentido tengo en carpeta un proyecto de reciclado de la basura, para el que estableceríamos un convenio con una empresa china que está dispuesta a invertir. Ese solo emprendimiento podría representar unos 200 puestos de trabajo genuinos. El mismo concepto vale para la minería. Con la experiencia del Bajo la Alumbrera, que benefició a muy pocos, hay que reactualizar la conciencia minera en base a parámetros que ya no pueden discutirse más, como son las condiciones ambientales y la mano de obra andalgalense en un porcentaje del 90%. A partir de esos parámetros, sin dudas, negociaremos de cara al pueblo”.
¿Cuáles serían sus planes en áreas como salud, educación y producción?
“Tengo, humildemente, un panorama claro para esos temas. En salud hay que dinamizar las postas sanitarias para que la atención abarque las 24 horas del día. Por allí también habrá una utilización de los becados, que serán libres y dignamente rentados.
En materia de educación, quienes me conocen saben lo que pienso. Hay que capacitar acorde a los proyectos productivos para que los egresados tengan un eventual salida laboral. Ello es posible porque toda la producción debe ser complementada por valor agregado o terminado con etiquetas que indiquen el origen andalgalense. Esto, que son palabras, significan trabajo. Esto vale, por ejemplo, para la producción de la pulpa de membrillo u otros productos que salen crudos.
También habrá que preocuparse por el parque automotor, que está destruido, y frena la producción por la falta de agua. No hay trabajo con los pozos y todo se desperdicia. Hasta se saquean las chapas y las bombas. Además, la obra pública será por administración. No hay mejor forma de utilizar el dinero público”.
¿Cómo está la planificación política?
“Estoy muy contento en ese sentido. Consustanciada con el proyecto de Corpacci, veo que la dirigencia está contenida y observa madurez. También hemos sumado a nuestros planes personas independientes y varias de ellas identificadas con el radicalismo u otros partidos. Trabajamos en diferentes distritos y en las emergencias no tengo problemas en aportar máquinas viales de mi propiedad. Es servicio, no aprovechamiento político, pero no sabemos por qué a las máquinas municipales no se las ve o no están operativas. Para estas cosas necesitamos gente nueva y confiamos en cambiar el escenario político. Una última reflexión: sería ideal que Andalgalá tenga el mismo color político que la conducción provincial. Es que Dios atiende está en todos lados, pero atiende en la Capital y, en menor medida, en Bue-nos Aires. También hay que hacer planes a largo plazo y, personalmente, estoy en esa planificación, que está más allá de las coyunturas”.