Ayer, de acuerdo a lo que pudo conocer este medio, se dio continuidad a la negociación por el incremento salarial de los empleados públicos para este año entre el ministerio de Hacienda, los gremios de la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).

Según trascendió, la posición que tuvo el titular de la cartera económica Sebastián Veliz fue de un incremento del 24% a pagar en cuotas.

En la previa al encuentro, UPCN había elevado una nota proponiendo elevar en seis puntos el aumento salarial. Vale decir, un incremento para los trabajadores del 30 por ciento a partir del primero de marzo.

El escrito fue acompañado con una serie de puntos como el blanqueo del aumento otorgado bajo el Decreto 2421/2014, la recategorización de todos los empleados de la administración pública provincial, el pase a Contrato de Servicios del personal becado con más de seis años de prestación y el pase a planta permanente de los agentes con contrato de empleado público.

Por su parte, desde ATE, gremio que encabeza Ricardo Arévalo, hicieron trascender que en el diálogo con el ministerio apostaban por la implementación e incorporación de una cláusula gatillo.

Según explicaron, el impacto que tuvo dicha cláusula en el bolsillo de los trabajadores duplicó el acuerdo salarial firmado por ambos gremios en las negociaciones salariales del año pasado cuando se acordó en un 17.5 por ciento. 

Así, aseguraron que ATE encaró la paritaria bajo la premisa de no firmar ningún acuerdo que no contemple la cláusula de indexación automática.

Esta posición significa una diferencia con la nota elevada a Véliz por parte de UPCN. Sucede que en el documento este gremio propuso una cláusula de revisión. Es decir, restablecer el diálogo “en caso de que las circunstancias inflacionarias superen el porcentaje de incremento salarial anual, dejar abierta la presente negociación paritaria”.