Levantó polémica el acuerdo salarial firmado entre el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (SOEM) con el Ejecutivo comunal de la Capital. Sucede que en el acta acuerdo se incluyó una cláusula que establece un aporte solidario de $200 por parte de los trabajadores municipales que no estén afiliados al gremio. 

Sobre este marco el edil de bancada opositora Simón Hernández (FCS-Cambiemos) había explicado que dicha cláusula “más allá de que se cita la ley de Asociaciones Sindicales, al ser un aporte solidario no podría ser compulsivo vía ordenanza puesto que puede contener un vicio de inconstitucionalidad”.

A la vez, el concejal mencionó que, si bien aún no será tratado por el cuerpo, al momento de hacerlo el bloque opositor propondrá “una redacción alternativa para salvar un poco esto”.

El hecho de que Hernández haya cuestionado la constitucionalidad de la cláusula tuvo directo impacto en el titular del SOEM capitalino. El secretario general del gremio, Walter Arévalo, apuntó directamente al concejal opositor invitándolo a que haga la presentación judicial correspondiente. “No tuvo una opinión igual por la OSEP, donde nosotros presentamos un recurso de amparo porque creemos que es incostitucional y él tendría que hacer lo mismo”, dijo Arévalo.

Sin perjuicio de ello, el dirigente gremial profundizó su rechazó a la opinión del concejal en tono político. “Por su desesperación de medir menos de un punto -como candidato al Ejecutivo municipal- está igual que bailarina del show de Tinelli; está buscando prensa y no sabe con quien”, manifestó. 

Arévalo no se quedó ahí. Es que también aludió al concejal Fernando Navarro. “Son dos los concejales del Frente Cívico que vienen desde el año pasado, y da la casualidad que son abogados, los mismos que se niegan y protegen a otras instituciones”, expresó y acotó que la dupla se negó “a tratar el tope del descuento, que lo metían al SOEM porque decían que le correspondía”.

El titular del SOEM comentó que en aquella oportunidad estuvo de acuerdo a que se aplique el tope “pero después lo negociaron con el Ejecutivo municipal y lo cajonearon porque afectaba sus intereses”. 

Así las cosas, reposó el foco en Hernández: “Simón Hernández existe porque es familiar de un político que estuvo muchos años, pero con todo el respeto que se merece, tiene que conseguir un trabajo honesto y entender lo que es trabajar. Así, cuando lo entienda, va a comprender el por qué hay que cuidar las instituciones sindicales”.