El empresario Benjamín Capdevila, fundador de la empresa constructora más importante de Catamarca, falleció ayer a los 76 años.
Capdevila luchaba desde hace un año contra una dura enfermedad y su cuadro se agravó irreversiblemente en la última jornada.
El viernes por la noche, encontrándose en la ciudad santafesina de Rosario, se descompensó y debió ser internado. Pese a los esfuerzos médicos, murió en la tarde de ayer.

La noticia causó un fuerte impacto en la comunidad empresarial y en distintos ámbitos, dado el rol protagónico que tuvo en las últimas décadas, fundamentalmente por su participación en la obra pública.

Capdevila era de origen santiagueño y su vínculo con Catamarca se formó cuando a su padre, que era oriundo de Añatuya, lo trasladaron a esta provincia como trabajador de la vieja empresa de Agua y Energía.

Allí trazó las primeras relaciones con los catamarqueños y sería ésta la provincia donde desarrollaría casi toda su vida, donde formaría una familia y forjaría su crecimiento profesional.

Luego de residir en Catamarca, aún con sus padres, tuvo una etapa en la ciudad de Rosario, donde completó sus estudios universitarios, obteniendo el título de Ingeniero Civil.

Ya como profesional, regresó a Catamarca a comienzos de la década del ‘70 y hasta tuvo un paso por la función pública, como administrador de Vialidad Provincial.

Luego de esa experiencia, se enfocó de lleno en la actividad privada y en sociedad con un riojano, Horacio Catalán, fundó la empresa constructora.
Quedó luego como único dueño y poco a poco fue consolidando la fuerza de la firma, que creció hasta transformarse en la más fuerte de Catamarca.

Capdevila ejecutó innumerables proyectos de obra pública y trabajó con la misma intensidad con gobiernos de diferente signo político.
Rutas, viviendas, edificios, el Predio Ferial, la peatonal Rivadavia y hasta el Estadio Bicentenario (trabajo derivado en un inconcluso litigio judicial), fueron trabajos que la empresa de Capdevila llevó adelante; pero su área de acción no se limitó a Catamarca y también concretó muchos proyectos de gran envergadura en la portuaria ciudad de Rosario.
La sede de la firma permaneció durante muchos años en calle República, entre 25 de Mayo y 9 de Julio, a pocas cuadras del corazón capitalino.

Benjamín mantuvo siempre un perfil bajo y a nivel personal formó una familia integrada por cinco hijos, dos varones y tres mujeres.
Fernando, Guillermo, Gabriela, Luján y Susana son los hijos de Capdevila.

Fernando, también ingeniero civil recibido en Rosario, es actualmente gerente de la regional local de Anses y un activo dirigente de Juntos por el Cambio, alianza política a la cual se integró desde el PRO, movimiento liderado por Mauricio Macri. 
Guillermo, por su parte, es quien asumió la responsabilidad de conducir la empresa Capdevila SA cuando su padre comenzó a alejarse por razones de salud.

La desaparición física de Capdevila generó múltiples muestras de consternación y condolencias, recibidas por hijos, hijos políticos, nietos y demás familiares del empresario.
La familia no había decidido, al cierre de esta edición, si los restos serían trasladados a Catamarca.

HISTÓRICA IMAGEN- Un joven Benjamín Capdevila (el segundo de derecha a izquierda), durante la visita del quíntuple campeón mundial de Fórmula 1, Juan Manuel Fangio, a Catamarca. Aparecen también César Carman, Nicolás Aníbal Martínez, Ricardo María Diego Moreno, Antonio Saadi y Ángel Luque, entre otros. La fotografía se tomó en inmediaciones del viejo Hotel de Turismo.