Las primeras novedades del gobierno andalgalense –allí debutó Eduardo Córdoba como intendente y cuatro nuevos concejales tomaron posesión de sus bancas- tuvieron que ver con los sueldos de los funcionarios. Si bien es cierto que sus salarios eran bajos, no es menos cierto que el Concejo Deliberante metió un cuchillazo de aproximadamente el 300% para llevar el haber de Córdoba a los $107.568. A partir de ese monto, cabe aclararlo, se calculan los porcentajes para los funcionarios de rango mayor y los mismos concejales. Así, Andalgalá pasa a encabezar el ránking de los sueldos del interior y lo hace en momentos que se está pidiendo austeridad a la clase política. De hecho, a nivel nacional se congelarán los sueldos de los legisladores y se revisarán, a partir de este mes, los regímenes especiales, incluidas las jubilaciones superiores a los $20.000.
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Ciertamente que los sueldos públicos y concretamente los de funcionarios deben medirse por el costo de vida y el nivel de sus responsabilidades. Sin embargo, como en cualquier otro trabajo, debe contemplarse la contraprestación. En este caso estamos hablando de un concejo deliberante como el de Andalgalá que registra pésimos antecedentes de producción, al punto que no se conoce cuáles fueron las ordenanzas que tuvieron debates o pudieron parir un instrumento legal que haya favorecido al funcionamiento y organización de la comunidad. 
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Aunque con otros integrantes –en diciembre dejaron sus bancas José Cativa, Ivana Flores, Gustavo Alvarez y Juan Gurrero-, lo más notorio de este CD que aumenta sus dietas con porcentajes desmesurados fue un escándalo político. Fue cuando aprobó una ordenanza antiminería con perfiles y trasfondos claramente inconstitucionales. Nada es eso. Aquella ordenanza integraba un texto de más de 50 páginas y el pueblo no conocía ni siquiera una línea. Tampoco fue debatida en la comisión. La resolvieron por unanimidad -8 votos a 0- en una sesión a puertas cerradas que duró minutos y que avaló el exintendente, Alejandro Páez, quien “casualmente” movilizó nombramientos en el municipio para la misma época.