Las ventas minoristas siguen sin recuperarse. Luego de haber caído un 11,6 por ciento en 2019, retrocedieron un 3,5 por ciento interanual en enero, según informó CAME. Los 12 rubros relevados cerraron en rojo. Las caídas más significativas fueron en “joyería, relojería y bijouterie” (-9,5 por ciento), “ferretería, materiales eléctricos y materiales para la construcción” (-8,4 por ciento) y “electrodomésticos, electrónicos, computación y celulares (-5,8 por ciento). Alimentos y bebidas, por su parte, cayó 2,5 por ciento.

Las ventas en locales físicos cayeron 4,1 por ciento, pero el promedio fue menor, pero la caída fue menor porque la modalidad online registró un crecimiento de 1,8 por ciento. En el caso del comercio electrónico, crecieron 6 de los 12 sectores relevados en la comparación anual y uno se mantuvo sin cambio. En la venta física, cayeron todos los rubros medidos. Los datos surgen de la medición de CAME en base a 1100 comercios de todo el país relevados entre el 29 de enero y el 1 de febrero.

Uno de los objetivos centrales del gobierno es recuperar la senda de crecimiento económico y para ello apuesta a alentar el consumo para que vuelva a ser el principal dinamizador de la actividad. La primera medida en esta dirección consistió en el pago de un bono de 5000 pesos en diciembre y otro en enero para todos los jubilados y pensionados que cobren el haber mínimo de 14.068 pesos. A su vez, quienes cobran más de la mínima, pero menos de 19.068 pesos en diciembre cobraron la diferencia hasta alcanzar esa última cifra, que es la que recibieron como piso todos los jubilados en diciembre y enero. Además, a los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo se les dio un plus de 2000 pesos por hijo.

Esos anuncios beneficiaros a 4,5 millones de jubilados y 2,2 millones de beneficiarios de la asignación social, pero las cifras de CAME muestran que por ahora no parecieran haber tenido un impacto significativo en el consumo.
El gobierno también aplicó en enero un aumento por decreto para los empleados públicos y privados. También comenzó a regir el incremento de 3000 pesos para trabajadores del sector público y privado, con la única diferencia que en el público será para salarios de hasta 60 mil pesos brutos. A partir de marzo el incremento comenzará a ser de 4000 pesos.

Pese a ello, los empresarios son cautelosos, aunque pareciera haber consenso respecto de que al menos el consumo dejaría de caer en los próximos meses. El 39,5 por ciento de los encuestados espera que en los próximos tres meses la situación mejore, un 49,6 por ciento cree que el consumo se mantenga en los niveles actuales y apenas el 13,9 por ciento restante considera que la crisis de ventas se profundizará.