La cadena de acontecimientos que se dieron durante la semana en lo referido a la situación de los precarizados de Higiene Urbana de la Municipalidad de la Capital, que incluyeron un paro sorpresivo, incidentes, un empleado lesionado, enfrentamientos con la Policía y daños en un rodado; generaron que se expresaran actores políticos y gremiales por lo ocurrido.
En el caso de la Unión Cívica Radical (UCR), mostraron su preocupación el presidente del Comité Provincia, Alejandro  Páez y la Organización de Trabajadores Radicales (OTR).
Sobre esta situación de los precarizados, Páez expresó, de acuerdo a lo dado a conocer,  su preocupación por la situación que atraviesan obreros y precarizados de la provincia, como ser el caso de Recreo (La Paz) y Capital. 
Además, le solicitó al gobernador Raúl  Jalil que “lleve adelante un diálogo con los mismos, evitando  la confrontación. Cuestión esta última que pondría en serio riesgo la integridad física y moral de quienes llevan adelante los reclamos”. 
Por último, expresó que el diálogo y la sensibilidad de los gobernantes  para con los más desposeídos, es el único medio para solucionar los conflictos”.
Por su parte, desde la OTR, Franja Morada y la Juventud Radical Catamarca, emitieron un comunicado en el cual se manifiestan sobre la situación de los precarizados que tienen “una gran desventaja frente al sistema y ejercicio de sus derechos”.  “El Estado debe ser el principal garante de los derechos y condiciones de labor dignas para todos los catamarqueños. La realidad es que, el mismo Estado, promueve la precarización laboral internamente, ocasionando una gravísima lesión a la institucionalidad y la legalidad de nuestro sistema jurídico”, expresan. 
Luego, hacen  hincapié en la “criminalización de la protesta social”, la cual, según dicen, salió a “la luz de manera pública” el pasado martes  en la “represión de las fuerzas de seguridad  en contra de los trabajadores que se manifestaban legítimamente”. 
“Las organizaciones radicales repudiamos enérgicamente la criminalización de las manifestaciones y nos solidarizamos con los trabajadores que están atravesando esta difícil situación en la cual la incertidumbre, la degradación, la negación y la violencia, promovida desde las mismísimas cúpulas del Estado provincial y municipal se ha convertido en habitualidad”, concluyen.