Disminuyó moderadamente la tensión creada por la cuestión minera entre la Provincia y el Municipio de Andalgalá. Sucede que ayer el gobernador Raúl Jalil viajó a la ciudad cabecera de la Perla del Oeste para la entrega de viviendas, oportunidad en la que también mantuvo una reunión de trabajo con el intendente Eduardo Córdoba y el diputado Alejandro Páez para dialogar sobre el conflicto minero y la seguridad, habida cuenta de los cortes que realizan grupos pro y antimineros.

Por lo pronto, ambos acordaron activar una Mesa Técnico Científica Minera cuya tarea será la de buscar descartar contaminación en el agua. Más precisamente en la cuenca del río Andalgalá, zona neurálgica del conflicto, ya que en el pasado originó una ordenanza que prohibió la explotación minera poniendo a la vez una traba al avance del proyecto Minera Agua Rica Alumbrera (MARA). Cabe recordar que esa disposición municipal fue rechazada por la Corte de Justicia.

Esta misma semana el jefe comunal había cuestionado al mandatario provincial quien, según dijo, lo “desilusionó”. El motivo del malestar de Córdoba fue por la presencia en el departamento del oeste de la ministra de Seguridad, Fabiana Segura, el lunes. Según había expresado el Intendente, la asistencia de la funcionaria fue una “maniobra” del Gobierno en momentos donde un grupo de promineros “que dicen ser desempleados de Santa María y que son pagados por la empresa MARA” cortaron el paso en la Ruta 47, camino que une Choya con Minas Capillitas.

Más allá de responsabilizar al Gobernador de ello, lo curioso de las declaraciones del jefe comunal fue la diferenciación que hizo para con la “gente del corte de Choya”. No cuestionó su accionar y solo diferenció que este grupo (antiminero) “está sobre un camino alternativo que va desde Capillitas al yacimiento Agua Rica”.

Más allá de eso, Jalil y Córdoba acordaron ayer avanzar con “la conformación de una Mesa Técnico Científica Minera”. Desde Casa de Gobierno precisaron que en ese espacio participarán “especialistas de los gobiernos provincial y municipal en una primera etapa para abordar los estudios necesarios para determinar si existe una potencial afectación de la cuenca del río Andalgalá”. En otras palabras, analizar si existe o no contaminación en el agua. El trabajo previsto para esa mesa contempla una segunda etapa, ya que posteriormente se sumarán actores claves de la minería, como la Universidad Nacional de Tucumán y la empresa estatal Yacimientos Mineros Agua de Dionisio (YMAD). 

Por otra parte, en lo que hace a la problemática de la Ruta N° 47 y el tránsito en la zona, Jalil comprometió una intervención rigurosa y detallada del Ministerio de Seguridad “para accionar y dar una solución a las protestas que se han realizado”. Así las cosas, el jefe de Estado provincial y el Intendente “acordaron mantener un canal de diálogo sostenido y dar respuestas conjuntas a toda la sociedad”.