Llegando al fin de semana, las cargas internas dentro del bloque oficialista parecen morigerarse. Al menos así lo sugirió el diputado Guillermo Marenco, quien compone el grupo de los ocho legisladores díscolos. El dirigente de la Renovación Peronista aseguró que en el Frente de Todos (FT) “no hay ruptura ni hay división” y que los 23 integrantes de ese bloque “tenemos que trabajar para que le vaya bien a las y los catamarqueños y para que a nuestros gobiernos provincial (que encabeza Raúl Jalil) y municipal (en referencia a Gustavo Saadi) les vaya bien”.

En diálogo con RadioOn, el diputado sostuvo que la ciudadanía: “No necesita de estas cuestiones internas de la política, la gente está preocupada, y con justa razón, de otras cuestiones de las cuales nosotros los políticos nos tenemos que ocupar”. En esta línea, señaló que se debe tratar de “desdramatizar la política” y remarcó que a la gente “le cae mal” ese tipo de discusiones que, en definitiva, no llevan soluciones: “Hay gente que la está pasando mal, que tiene muchos problemas”.

“No tenemos que perder el eje, el eje es la sociedad, laburar para que les vaya bien a las y los catamarqueños, para eso nos pagan. En este caso, yo como miembro del FT trabajo para que a los gobiernos de Jalil y de Saadi les vaya bien, lo mejor posible, y en términos generales, los 41 diputados de cualquier color político tenemos que trabajar para que a Catamarca le vaya bien”, insistió.

También se refirió a la elección del presidente del bloque, Ramón Figueroa Castellanos, como titular de la Comisión de Asuntos Constitucionales, hecho que hizo estallar el malestar. Justamente sobre este tema, reconoció que la discusión interna existió pero que se definió como en cualquier sistema democrático, “votando”. “Creo que hay una situación que tiene que quedar dentro del bloque, no sacarla para afuera”, se dirigió a sus pares.

En este orden de ideas, apuntó: “Tenemos que tener la sapiencia necesaria para darnos cuenta de que a las y los catamarqueños no les interesan la pelea de los políticos, sino cómo pueden solucionar el día a día. Si nosotros no entendemos eso, no entendemos nada de política, seguimos estando en la misma y con justa razón por ahí nos putean en la calle”.
Por otra parte, reconoció que la última sesión tuvo que ser levantada ya que estaban representantes de ambos bloques deglutiendo. “Fue un error de nosotros, en ese sentido, la presidenta (Cecilia Guerrero) no tiene nada que ver, hizo lo que tenía que hacer, convocarnos, y no nos dimos cuenta. Hay que saber reconocer cuando se cometen ese tipo de errores, yo en mi caso particular, sí lo reconozco”, dijo.

 Sin perjuicio de ello, refutó al opositor José “Chichí” Sosa que el oficialismo haya evitado hablar de la interna. “Por ahí Sosa, para crear un poco más de prensa, seguramente  lo habrá  dicho y lo dirá. Está bien que lo diga, es un problema de él, pero no tiene nada que ver con la interna”, remarcó Marenco.