Ni la Virgen se salva de la inseguridad. Momentos de incertidumbre y tensión se vivieron en la jornada de este jueves cuando los sacerdotes se percataron que la corona de la Virgen del Valle, que descansa en la Catedral de Añatuya, provincia de Santiago del Estero, había desaparecido.

El insólito hecho fue denunciado por el Obispo José Luis Corral, en la dependencia policial de aquella localidad, aunque desde un primer momento estaban abocados a recuperar el objeto de importantísimo valor simbólico, más que atrapar al sigiloso ladrón.

Afortunadamente en horas de la noche del mismo jueves un llamado anónimo alertó a la policía sobre la ubicación del objeto. Tras recuperar la corona, las autoridades informaron que una mujer con retraso madurativo había tomado la corona y la habría llevado a su casa, mientras que su familia fue la encargada de devolverla.

El objeto fue restituido al Obispado, cuyos representantes luego agradecieron a través de las redes sociales a la policía y llevaron tranquilidad a la comunidad.

"Gracias a Dios ha sido restituida la corona de la Virgen del Valle. Agradecemos la pronta y resuelta acción policial que logró su devolución. La Madre de Dios coronada por el amor y devoción de sus hijos luce como siempre en su casa, nuestra Catedral".