Por la suba de nuevos casos de COVID-19, Tucumán al igual que gran parte del país presenta un notable incremento en la demanda de testeos.
En los centros de testeos de la provincia comenzaron a observarse largas colas de personas que buscan hisoparse para descartar tener COVID-19, ya sea por presentar los síntomas compatibles con la enfermedad o por haber tenido contacto estrecho con una persona infectada.
Es por esta razón que a través de las redes sociales, comenzaron a aparecer voluntarios que se ofrecen a hacer las filas para esperar el turno del hisopado. La espera la cobran $600.