La Iglesia Nuestra Señora de La Merced, ubicada en la localidad de Villa Dolores, departamento Valle Viejo, es una de las veinte iglesias dañadas por el sismo de 2004 y una de las últimas en iniciar su restauración. La falta de presupuesto frenó las obras en varias oportunidades, lo que determinó que el templo permaneza clausurado desde hace más de seis años. Toda la comunidad chacarera espera que la obra de restauración termine cuanto antes, ya que carecen de un espacio físico adecuado para las celebraciones religiosas.
El jefe del departamento de Patrimonio Histórico de la provincia, Rafael Toledo, detalló que las obras en la iglesia ubicada en Villa Dolores tienen un avance del 85 por ciento, lo que sugiere que podría estar finalizada a fin de año.
Toledo explicó que la obra se está llevando a cabo a través de una empresa privada, la cual tuvo que parar durante más de un año por falta de presupuesto. Sin embargo hoy los trabajos se reiniciaron y la nave principal, uno de los sectores con mayores daños, fue recientemente culminada.
Se conoció que desde el sismo de hace seis años la iglesia tuvo que ser clausurada por los serios daños como, por ejemplo, en una parte del techo que estaba construido de adobe.
“La parte central estuvo a punto de derrumbarse, por lo que se tuvo que intervenir con mucho cuidado, ya que es un patrimonio histórico” resaltó Toledo.
Para la recuperación del templo se contrató a una reconocida empresa privada, la misma que restauró la histórica iglesia de San Pablo en el departamento Capayán. Para Toledo, reparar cuanto antes el lugar es importante porque significa recuperar un edificio patrimonial que data del año 1805.
Quienes padecen los efectos de la clausura son los vecinos de la zona, que concurren a la celebraciones los días domingos. También se resintieron desde hace seis años las fiestas de primera comunión y confirmación de los niños, quienes deben ir a la iglesia de San Isidro.