La falta de electricidad es uno de los problemas más graves que sufre la provincia como consecuencia de la crisis energética.

En uno de los sectores de la ciudad capital donde más se percibe este problema es en el barrio Santa Marta, donde un grupo de vecinos con cacerolas en mano y enarbolando banderas de protesta, cortaron la ruta 38, con el fin de reclamar por los prolongados cortes de energía que sufren hace dos semanas.

Los vecinos exigieron la normalización del servicio y la instalación de un nuevo alumbrado eléctrico, ya que según manifestaron, muchos de ellos “estaban colgados”.

Son muchas las familias que debieron padecer las bajas temperaturas registradas en la última semana, y pese las protestas, la ayuda nunca llegó.

El corte se inició en horas de la mañana y se extendió hasta las 19, y según explicaron, se seguirá hasta que la empresa Edecat les regularice el servicio.

Desde la empresa, no brindaron explicaciones.